ARQUEOLOGÍA

La detención de un traficante permite hallar tres tumbas faraónicas

Por Eliane Hernández Montejo1 min

Cultura10-06-2002

El saqueo de tumbas era una práctica habitual en el antiguo Egipto, práctica que sigue existiendo en nuestros días. La detención de un traficante de piezas arqueológicas ha llevado a una comisión investigadora de arqueólogos al descubrimiento de tres nuevas tumbas faraónicas en los oasis de Al Bahareya.

Ramadan Bediny Hasan, un conductor de 58 años fue detenido acusado de traficar con piezas arqueológicas. Durante las investigaciones policiales admitió haber descubierto casualmente una tumba. Por lo que pido un permiso para construir su casa en ese solar. Así comenzó a excavar en el terreno, sacando de la tumba diversas estatuillas que vendía a traficantes. La inspección del lugar llevó al descubrimiento, a tres metros bajo el suelo, de las tumbas, construidas con piedra caliza y conservadas en buen estado. A través del pozo excavado por Hasan se accedía a una primera tumba. Ésta conduce a otras dos, situadas a pocos metros, que el conductor no había saqueado aún. Las tres tumbas encontradas pertenecen a la XXVI dinastía faraónica, del Imperio Saíta,que gobernó Egipto entre los años 664 y 525 antes de Cristo. Las dos últimas, que parecen estar intactas, son de la época del faraón Apries, el cuarto soberano de esa dinastía. La comisión investigadora de arqueólogos que se encargó de inspeccionar los descubrimientos, encontró también capiteles de columnas con inscripciones jeroglíficas que indicarían la existencia de un templo dedicado al culto de Amón Ra. Los oasis Al Bahareya, en el desierto Occidental, son un importante yacimiento arqueológico. Allí se está situado el Valle de las Momias Doradas, donde hace algo más de tres años se empezó a investigar una necrópolis romana de gran tamaño, en la que se han encontrado numerosas tumbas y momias desde 1999.