CRISIS ECONÓMICA

El presidente del CES prevé una salida lenta de la crisis

Por Ana Pascual Ases3 min

España09-05-2013

Marcos Peña, presidente del Comité Económico y Social (CES) durante su visita a Castellón para participar en el encuentro anual de los Consejos Económicos y Sociales, ha considerado que la situación de desempleo actual que vive España es “pavorosa” y que ve “casi inmoral prometer medidas a la gente con la pretensión de que van a tener efectos inmediatos, porque no es así”, augurando que la salida de la crisis durará “como poco” 15 años debido a que la recuperación económica va a ser muy lenta. Peña ha subrayado que “tenemos que ser capaces de ver cómo transitamos esos 15 años”, considerando que “el problema no es salir de la crisis, sino saber qué vamos a hacer en esta situación, pues son más importantes los medios que los fines”.

Durante su declaración ha criticado los “grandes pactos” políticos que puedan alcanzarse para salir de la crisis, y que las “medidas inmediatas de poco sirven”, para poder salir de la recesión “más que medidas” es necesario establecer un código de circulación que permita a España “transitar” durante esos quince años, Peña ha apostado por el “el reforzamiento institucional” que “es necesario para dar un paso hacia adelante” y “crear un país creíble y serio”. En su opinión, “no es suficiente una reivindicación nominal de acuerdos políticos y grandes pactos, pues de la situación actual o nos sacan los políticos o no nos saca nadie, por lo que los políticos tienen la obligación de hacer cosas que sean tangibles. El presidente ha asegurado que “hay que saber cómo hacerlo, y ese cómo incorpora a muchas personas en la tarea”, considerando que “no puede ser una acción magistral de nadie porque la fórmula magistral no existe, y el país lo está pasando muy mal y lo seguirá pasando mal durante bastante tiempo”. Peña ha asegurado que la situación de desempleo que existe en el país “es una realidad que viene acompañada del convencimiento de que las medidas inmediatas no van a resolver la situación porque no existen” y “que la solución parte de apostar por la educación y la innovación”, además del reforzamiento institucional. Según ha declarado, “de la crisis sólo van a sacarnos las personas capacitadas, por lo que habrá que capacitar a los ciudadanos y darles una educación universal, pública y gratuita”. Para el presidente del CES lo “esencial” es que “la sanidad funcione y se garantice, que la educación sea la apuesta esencial y que las pensiones estén garantizadas, pues es el triángulo del bienestar”, ha explicado que “cuando los ciudadanos perciban que eso está asegurado, de nuevo nacerá el afecto y la credibilidad entre la ciudadanía y la clase política”. Ante la posibilidad de que en España se pueda producir una revolución social, Peña ha negado que pueda suceder porque percibe que es “un país bastante serio y razonable, pues la gente, incluso pasándolo mal, está como a la espera y confiada en que esto tendrá algún arreglo y dispuesto a comprometerse en el arreglo”. Así mismo, ha querido explicar que lo necesario para poder avanzar es “más que el crédito financiero, el crédito político, es decir “convertirnos en un país que funcione bien, creíble y que reivindique una de las acciones más nobles que jamás han existido, que es la acción política”. Ha solicitado un “mayor entendimiento político” en España, y “una mayor cooperación institucional en todos los poderes públicos, rematado con un compromiso social que sea capaz de repartir de manera equitativa los sacrificios”. Por otra parte, el presidente del CES en la Comunitat Valenciana, Rafael Cerdá, ha destacado que es necesario revisar el funcionamiento de los CES autonómicos “a través del diálogo con el resto de comunidades autónomas”, y que deben seguir existiendo porque “son el instrumento perfecto de participación de la sociedad civil para incardinarla en las decisiones políticas y en los órganos de gobierno”. Cerdá ha explicado que en la Comunitat Valenciana no se ha planteado el cierre del CES, aunque en otras comunidades como en Castilla La Mancha “ha desaparecido”, en Baleares “está suspendido”, y en la Rioja, Ceuta, Cantabria y Madrid, no “funcionan”.