CRISIS ECONÓMICA
La morosidad continuará aumentando
Por Pepe Olmedo2 min
Economía07-05-2013
El Banco de España ha señalado que la morosidad de hogares y empresas con el sistema financiero, del 10,8% en el último mes del ejercicio pasado, continuará creciendo al menos durante 2013 a pesar de la trasferencia de los activos problemáticos a la Sociedad de Gestión de Activos Inmobiliarios que proceden de la Restauración Bancaria (Sareb), el conocido como ‘banco malo’.
En su Informe de Estabilidad Financiera, el Banco de España indica que lo que explica este repunte de la morosidad de las empresas y los hogares son los activos dudosos del crédito al sector privado, que “más allá de su reducción derivada de los traspasos de las entidades a la Sareb, han seguido aumentando, junto a la falta de préstamos. A todo esto debemos incorporar una “lenta” disminución de la deuda que albergan tanto hogares como empresas con motivo de la caída de las rentas. Según detalla el Banco de España, ha sido de un 11,2% la caída de los beneficios de las empresas, viéndose de esta manera reducidos sus ratios de rentabilidad, mientras que los hogares han de sufrir más desempleo, una menor cantidad de ingresos y una deducción del 10% en el precio de la vivienda durante este último año. El organismo regulador ha advertido que “todo ello configura un panorama de elevada presión financiera en el sector de las familias y sociedades no financieras”. “En un entorno macroeconómico como el que se espera para el ejercicio en curso, cabe esperar que la morosidad bancaria siga en aumento” han añadido en el informe. Pese a todo esto, el Banco de España observa que la banca española tiene la capacidad de poder aguantar el incremento de la morosidad gracias a “las provisiones realizadas como consecuencia de los reales decretos leyes, las pruebas de resistencia y los traspasos del Sareb”. En cuanto a todo esto, el organismo liderado por Luis María Linde ha estimado que las probabilidades de impacto proyectadas hasta el próximo curso económico se encuentran “alejadas” de las que estaban contempladas en el escenario más adverso previsto por los test de estrés, aunque sí que se estima que superen las proyectadas en la base. El Banco de España alcanza esta conclusión final gracias a los ejercicios retrospectivos y prospectivos cuyo objetivo era comparar las frecuencias de impago en 2012 y las esperadas hasta 2014.