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REFORMA LEGISLATIVA

PP y PSOE pactan los puntos más conflictivos de la Ley de Partidos

Fotografía El líder de Batasuna, Arnaldo Otegi, en una rueda de prensa de la formación abertzale

El líder de Batasuna, Arnaldo Otegi, en una rueda de prensa de la formación abertzale

Por Mª Jesús TorresTiempo de lectura2 min
España18-05-2002

El pasado martes, cuando faltaba muy poco para que se cerrara la ventanilla del registro del Congreso y, con él, el plazo propuesto por el Gobierno para tramitar su proyecto de Ley de Partidos Políticos, Partido Popular (PP) y Partido Socialista (PSOE) llegaron a un acuerdo sobre los puntos básicos del texto legal que pretende ilegalizar Batasuna y que hasta la fecha habían sido los ejes de discordancia entre populares y socialistas.

Para que este proyecto de Ley pudiera conseguir en el Congreso más del 90 por ciento de los apoyos, tuvieron que ceder PP y PSOE. La negociación se centró en las causas de disolución de un partido político, el procedimiento para instar la ilegalización, y la posibilidad de una aplicación retroactiva, lo que habría sido inconstitucional. Ese porcentaje de apoyos lo conseguirá no sólo con los votos favorables al texto modificado de populares y socialistas, sino con los de Coalición Canaria (CC) y con los de Convergència i Unió (CiU). Los catalanes darán su voto favorable al texto pactado el pasado martes, pese a mostrarse bastante reacia a votar a favor de la Ley y también, como anunció Xavier Trias, portavoz de CiU en el Congreso, a favor de la enmienda a la totalidad que el Partido Nacionalista Vasco (PNV) presentó a la Ley de Partidos, porque los nacionalistas vascos "nos lo han pedido". Junto con el PNV, Izquierda Unida (IU) y cinco partidos del Grupo Mixto del Congreso pedirán que el texto sea devuelto al Gobierno para que lo modifique. Sin embargo, con el apoyo de las fuerzas mayoritarias la nueva ley saldrá adelante y se cumplirá el plazo previsto por el Gobierno. Después de una semana de discusiones e idas y venidas de socialistas y populares, ambos grupos pactaron los puntos fundamentales, ya que alargarse en la negociación suponía ampliar una semana el plazo de las enmiendas y retrasar toda la planificación. El PSOE confía en poder seguir negociando flecos ya en el Parlamento. Con estas modificaciones ya ha alcanzado los objetivos que se había propuesto para dar su apoyo a la ley. Según el líder socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, "el PP, al fin, ha entendido cómo se hacen las cosas, y así ha ganado la democracia y han perdido los violentos". El ministro de Justicia, Ángel Acebes, se felicitó por la negociación, en la que dijo que no había habido "ni vencedores ni vencidos porque la única que ha salido derrotada ha sido ETA". "Con esta ley", dijo, "gana la democracia y pierde el terrorismo, ganan las víctimas que sufren el terrorismo y pierden ETA y Batasuna". Las críticas vinieron desde el PNV y su presidente, Xavier Arzallus, que atribuyó el apoyo del PSOE y la disposición favorable de CiU al "temor" a Aznar y a su política "autocrática" que tiene "asustado a más de uno".