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Francia

Tres activistas kurdas, asesinadas en París

Por Irene HernándezTiempo de lectura1 min
Internacional10-01-2013

Fuentes policiales afirman que "la escena podría hacer pensar que se trata de una ejecución planificada". Estas tres militantes kurdas fueron encontradas con disparos de bala en la cabeza en el Centro de Información del Kurdistán de la capital francesa. La Federación de Asociaciones Kurdas de Francia (FEYKA) ha convocado a todos los kurdos residentes en Europa a manifestarse en París para denunciar este crimen.

Las fallecidas son Fidan Dogan, representante del Congreso Nacional del Kurdistán (KNK) y trabajadora en el centro cultural kurdo, Sakine Cansiz, una de las fundadoras del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), y la joven activista política Leyla Soylemez. Estas dos últimas se encontraban de paso por la ciudad. Los cuerpos fueron localizados en la madrugada, cuando varios amigos se personaron en el local preocupados por la falta de respuesta a sus numerosas llamadas telefónicas. Una vez allí, decidieron tirar la puerta al descubrir algunos rastros de sangre en la entrada. El ministro del Interior francés, Manuel Valls, se ha trasladó enseguida hasta el lugar de los hechos. Posteriormente, ha confirmado que las tres mujeres fueron "ejecutadas". Además, Valls ha calificado de "grave" e "inaceptable" este suceso, cuya investigación se lleva a cabo por la sección antiterrorista de la Fiscalía de París y a la Subdirección Antiterrorista de la Policía. Activistas de la comunidad kurda de París han anunciado la organización de una concentración en protesta por el crimen, animando a todos los kurdos residentes en Europa a manifestarse. Nada más conocerse el suceso, entre 100 y 200 miembros de esta comunidad se han desplazado al lugar del crimen al grito de "¡revancha!" y "¡todos somos PKK!". La comunidad kurda, entre 50 y 60 millones de personas, se encuentra repartida entre Turquía, Siria, Irán, Irak y Armenia. Casi la mitad de sus miembros vive en Turquía, mientras que solo en Francia viven alrededor de 150.000 kurdos, la mayoría de origen turco. Cabe señalar el hecho de que este ataque haya coincidido con el inicio de negociaciones directas entre el Gobierno turco y el líder y fundador del PKK, Abdulá Ocalan, encarcelado en régimen de aislamiento total en la isla de Imrali desde 1999.