TRAGEDIA EN EE. UU.

Asesina a 20 niños y 6 adultos en una escuela de Connecticut

Barack Obama, en su mensaje a la ciudadanía tras el crimen de Newtown (©foto: Casa Blanca)

Por David Martin Martin2 min

Internacional16-12-2012

Un joven de 20 años, identificado como Adam Lanza, entró en la escuela primaria de Newtown, Connecticut, y asesinó a 27 personas, entre los que había veinte niños de edades comprendidas de los seis a los siete años, seis profesores y su madre, a la que asesinó previamente en su propia casa. Finalmente se suicidó.

El autor asesinó a su madre, profesora del colegio en el que protagonizó la matanza, con un arma de fuego, disparándola en el rostro. Vestido de negro, con un chaleco antibalas, una máscara y tres armas de fuego, dos semiautomáticas y un rifle, que pertenecían a su madre, entró en el colegio “por la fuerza”, según aseguró horas después el teniente Paul Vance en rueda de prensa. Tras matar a la directora y psicóloga de éste, que salió al vestíbulo alarmada por los ruidos, se dirigió al aula donde impartió clases su madre. Una vez allí realizó más de cien disparos contra los niños que estaban recibiendo clase. Una hora después de la matanza aún no se había evacuado por completo el centro. El tiroteo tuvo lugar pasadas las 9.30 de la mañana (15.30 en la Península). Cuando acabó se quito la vida. Dieciocho de los menores fallecieron en el colegio mientras que otros dos fueron trasladados al hospital donde murieron horas más tarde. Se facilitaron las identidades de las victimas unas horas después del terrible suceso y se supo que las profesoras que murieron lo hicieron salvando la vida de sus alumnos y son consideradas por los padres de los niños, como heroínas. El asesino, Adam Lanza, tenía 20 años y era un chico tímido y reservado, antiguo alumno de esa escuela. La descripción de sus excompañeros esboza el tipo de relación que entablaba con ellos: físicamente era pálido, flaco y alto y su carácter y personalidad era la de un chico tímido y muy introvertido, tanto era así que incluso algunos de sus vecinos ni se habían percatado de su existencia. El padre de una de sus compañeras aseguró que ninguno de los miembros de su familia había hablado con Adam en tres años. Además, no tenía ninguna cuenta en redes sociales. "Era uno de los chicos más listos que conozco. Probablemente era un genio", aseguró a AP Joshua Milas, compañero de instituto de Lanza, con quien asistía al club de tecnología. Los expertos aseguran que podía sufrir un trastorno de la personalidad o síndrome de Asperger (un trastorno del espectro autista). De hecho, agentes policiales aseguraron que investigaban este extremo. En principio varios medios estadounidenses indicaron que el autor era su hermano, Ryan Lanza, pero las autoridades confirmaron que éste último no estaba implicado en el trágico tiroteo. Al parecer, la confusión inicial entre Ryan, que reside en Hoboken (Nueva Jersey) y trabaja en Ernst & Young, y Adam se debió a que en el cuerpo del asesino se halló la documentación del primero, según The New York Times