País Vasco

Urkullu pide "apoyo" para sus planes políticos en su investidura

Por Diego Ruiz2 min

España13-12-2012

El próximo lehendakari, Iñigo Urkullu tras terminar su primera sesión de investidura, ha mandado un mensaje claro a todos los partidos presentes en la Cámara vasca, el de apoyar los cambios que pretende impulsar para hacer frente a la crisis, para acabar con la violencia y para crear un nuevo marco político con fin de renovar el Estatuto de Gernika de 1979.

Durante la sesión de investidura se ha visto un Urkullu muy social reclamando corresponsabilidad política ante las dificultades, aunque también ha sido una intervención cargada de referencias genéricas sin concretar. El Lehendakari cree que es tiempo de aportar ideas y apoyo y no sólo de exigir. El presidente del PNV ni siquiera trató un punto clave en su programa electoral, el de realizar en el año 2015 una consulta del “nuevo estatus” en el que en teoría, están trabajando un grupo de expertos en el Parlamento Vasco. Sin embargo, Urkullu ha apelado a “recuperar el sentido moral de la política” un punto clave en su discurso; y es que cree que es algo muy necesario para emplazar al resto de “fuerzas a trabajar para conseguir la desaparición de la violencia, a salir de la crisis creando empleo y a mejorar las condiciones socioeconómicas de los ciudadanos”. Por esta razón aboga por “una Euskadi dueña de su propio destino”. La primera propuesta de la que habló en su investidura fue del plan de reactivación económica y de choque para crear empleo. Después trató de plantear un acuerdo por la paz “desde la memoria y la justicia”. En tercer lugar, el Lehendakari habló del “nuevo estatus” de Euskadi que desarrollará su gobierno. Estos tres puntos son los que le han acompañado durante toda la campaña política de cara a las elecciones vascas de este año. Este “triple objetivo” concluirá mañana en la segunda jornada de investidura. Como adelanto, el líder del PNV ha asegurado el plan de racionalización de la administración vasca, además de las sociedades públicas. También planteó la necesidad de crear un “nuevo entramado institucional vasco” de cara a las malas previsiones económicas. A pesar de la “contracción económica y de la pérdida de empleo” que llegará al País Vasco en el primer año, Urkullu se ha mostrado muy optimista. A pesar de la “tormenta que se avecina”, Urkullu ha definido a su Ejecutivo como un “Gobierno de acción”. Para salir del “atolladero” ha mostrado sus cinco líneas de trabajo para lograr la recuperación económica; estos cinco puntos estarán dirigidos al empleo juvenil, a los emprendedores, a la internacionalización y la innovación.