EUTANASIA

Estrasburgo falla en contra de que un hombre ayude a morir a su mujer

Diane Pretty ha visto rechazado su deseo de morir de una manera "digna"

Por Carmen Rosa Fernández1 min

Sociedad02-05-2002

Diane Pretty ha visto frustrado su opción de abandonar el estado degenerativo en el que le ha postrado su enfermedad, esclerosis lateral amiotrófica, después de que el Tribunal de Estrasburgo rechazara su petición de que Brian, su marido, le ayudara a morir. Pretty, de 43 años y madre de dos hijos, tiene el cuerpo paralizado y debe alimentarse a través de una sonda.

El avanzado estado de su enfermedad le supondrá dentro de poco tiempo un proceso de asfixia pulmonar muy penoso que la mujer quería evitar con la ayuda de su esposo. Por esta razón Pretty agotó todas las instancias del Reino Unido con su petición hasta que en noviembre su demanda fue desestimada definitivamente en Londres y llegó hasta Estrasburgo el 19 de marzo. Allí Pretty no dejó de reivindicar su derecho a morir y de acusar al Reino Unido de violar cinco artículos de la Convención Europea de Derechos Humanos -el del derecho a la vida, de la prohibición de tratos degradantes, del respeto a la vida privada, de la libertad de conciencia y de la prohibición de discriminación-. El Tribunal Europeo ha definido estas acusaciones como "distorsiones del lenguaje" y ha fallado por unanimidad en contra de Pretty, con la puntualización de que una sentencia favorable provocaría un serio riesgo de abusos al respecto. La sentencia puede recurrirse ante el plenario del mismo tribunal en un plazo de seis meses, un tiempo demasiado largo si se tiene en cuenta la gravedad de la enferma. Diane Pretty mostró su decepción en una rueda de prensa en la que se declaró arrebatada de todos sus derechos, mientras su abogada, Mona Arshi, y la Sociedad para la Eutanasia Voluntaria esperan continuar su lucha para cambiar las leyes británicas. En Europa tan sólo Holanda permite la eutanasia y Bélgica está en trámites de aceptación. El caso de Pretty ha conmocionado a los europeos y múltiples asociaciones de todo el continente se han hecho eco del caso en sus páginas web (www.eutanasia.ws o www.vidahumana.org, por ejemplo) para dar fuerza a sus reivindicaciones y que la práctica de la eutanasia no se considere un crimen.