ORIENTE PRÓXIMO
La celebración palestina del Día de la Tierra deja al menos un muerto
Por Alberto Carretero Aguado
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Internacional30-03-2012
La ciudad de Kafrein, en el valle del Jordán, ha acogido este viernes a miles de jordanos acompañados por activistas internacionales para unirse de forma simbólica al Día de la Tierra. En este día los palestinos protestan por la expropiación de sus terrenos.
Hamam Said, líder de los islamistas Hermanos Musulmanes en Jordania, se ha dirigido a los cerca de 20.000 presentes en un sermón, con motivo de la oración del mediodía. Durante el sermón, Said ha afirmado que hasta que Jerusalén (Al Quds para los árabes) no sea liberada y quede en manos palestinas no habrá acabado la primavera árabe. Said subrayó: “Hemos venido aquí para enviar un mensaje claro al mundo, que ya es hora de que los árabes y los musulmanes liberen la mezquita de Al Aqsa (en Jerusalén)”. Estas palabras describieron el significado de la marcha de miles de jordanos hacia el Valle del Jordán, el punto geográfico más cercano a Jerusalén en Jordania, ciudad de la que le separan unos 70 kilómetros. El Día de la Tierra recuerda la muerte de seis árabes del norte de Israel en 1976 cuando protestaban contra la expropiación de sus terrenos y la judaización de la Galilea. Representantes de 80 países de todo el mundo, como Estados Unidos, Reino Unido, Grecia, Indonesia o la India, se han unido a la protesta, así como cuatro rabinos judíos. El Gobierno ha desplegado sus fuerzas de seguridad en el Valle del Jordán para cubrir a los manifestantes y evitar los incidentes en esta región fronteriza. La marcha pacífica de los manifestantes no tenía la intención de cruzar la frontera con Cisjordania, controlada por el ejército israelí. Sin embargo, una docena de jóvenes realizó un intento de cruzar el límite fronterizo, que fue abortado por policías jordanos. Los principales incidentes de la jornada han sido la muerte de un joven palestino en Gaza a causa de los disparos de soldados israelíes durante una protesta en las cercanías del paso fronterizo de Erez y una treintena de palestinos que han resultado heridos leves como consecuencia de los enfrentamientos con tropas israelíes.