FÚTBOL SALA

El Barça tuvo que esperar a la prórroga para ser campeón

Por Roberto J. Madrigal3 min

Deportes11-03-2012

El Barcelona se encontró con mucha más resistencia de la esperada en la final de Copa de España. El Lobelle de Santiago logró anular por dos veces las ventajas azulgranas y llegó a forzar la prórroga, pero sin más fuelle, no pudieron resistir el vendaval que se les vino encima en el tiempo añadido. Sergio Lozano, con dos goles, fue elegido mejor jugador de la final.

La tensión presidió la final, con dos equipos muy conscientes de que un error podría ser definitivo. El Barcelona jugó con paciencia, confiando en su superioridad física -en cada choque, los jugadores culés se mantenían en pie, mientras que los gallegos tenían más problemas para no caer al suelo-, a expensas de asestar el golpe en una oportunidad que tarde o temprano, terminaría por llegar. Las opciones del Lobelle pasaron por una gran concentración defensiva y la velocidad para la transición al ataque. Las arrancadas de Raúl Campos, y sobre todo, de Bruno Rocha, Chaguinha, que estuvo muy listo para defender las líneas de pase e interceptar el balón para salir como una flecha hacia la puerta contraria, dieron más de un susto a los catalanes. Con todo, Cristian Domínguez se mostró tranquilo y le ganó los dos mano a mano al brasileño. El Barça, poco a poco, fue ganando metros y a los santiagueses no les quedó otra que vaciarse para evitar los remates; los más activos fueron Jordi Torras, con dos buenos disparos desde la frontal del área, Ari Santos y Sergio Lozano. El ala madrileño dispuso de un par de grandes remates y estrelló el balón en el poste, tan solo 15 segundos antes de llegar al descanso. En la segunda mitad, el acoso del Barcelona logró derribar por fin la resistencia gallega. Tras un doble remate de Wilde Gomes al cuerpo del portero, Javi Rodríguez fue más listo que nadie y ganó la posición para rematar con ventaja un córner y poner en franquía a los azulgranas. La tromba se completó con un remate al larguero del propio Wilde, que pudo haber sido definitivo, El brasileño acabó poco menos que exasperado, tras marrar un nuevo remate solo, a dos metros de la portería. Con el partido a favor, el Barça se replegó para hacer correr a los hombres del Lobelle y sentenciar al contragolpe. Fernando Golçalves, Fernandão, se volvió a tropezar con la madera, y Wilde erró un remate a dos metros de la línea, con la única oposición de Álex González. El Lobelle se mantenía vivo y trató de probar a Cristian con los disparos de Chaguinha y David Ruiz. La fortuna la encontró Raúl Campos, cuyo disparo desvió un defensor. El Barça se encorajinó y apretó, con rabia, para retomar la ventaja. La consiguió de inmediato: una incursión de Torras dejó solo a Wilde, que solo tuvo que empujar a la red. Pero el Lobelle quiso estar a la altura y Rubén Lemos, Rubi, rebañó un balón sin dueño para devolver, con un remate raso, el empate al marcador. El Barcelona, ya más nervioso se calmó y buscó la circulación: Saad Assis, que hizo lucirse con un bonito despeje a Álex, estuvo muy activo, aunque los hombres del Lobelle cerraron a toda costa los remates culés, que no pudieron impedir la prórroga. Sin embargo, tras un primer remate de Rubi, Fernandão -cuyo trabajo como pivote fue muy valioso- vio la llegada de Lozano, que remachó con todo a favor. La tercera remontada terminó siendo demasiado para el Lobelle, que se vació, aun a riesgo de sufrir un cuarto gol. Lo recibió de la forma más dolorosa, en una falta que Saad no embocó de primeras, pero cuyo rechace no desaprovechó un hambriento Búfalo Lozano. Con un rival volcado, sin portero, Wilde no tuvo más que aprovechar un balón perdido para certificar el título. Carlos Muñiz, Charlie, tan solo pudo salvar el orgullo de los suyos a cinco segundos del final, contra un rival ya relajado. Goles: Javi Rodríguez (7') Raúl Campos (34') Wilde (35') Rubi (36') Lozano (41') Lozano (43') Wilde (44')