Copa del Rey
El Real Madrid se proclama Rey de Copas
Por Carlos Timón3 min
Deportes19-02-2012
El Real Madrid conquista el título copero 19 años después y es el equipo que más títulos ha logrado: 23. El máximo anotador de los blancos fue Llull con 23 puntos y el que más dio la cara por los azulgrana fue Boniface Ndong con 19 puntos.
Todo parecía estar en contra del Real Madrid al disputarse la final de Copa del Rey contra el Fútbol Club Barcelona. Los blaugrana eran los defensores del título, y los blancos llevaban 19 años sin levantar ese trofeo. Además, el torneo se disputaba en Cataluña. Pero dos héroes madridistas, Llull y Carroll se encargaron de acabar con la maldición copera. Con ello, el Real Madrid consigue 23 títulos coperos, frente a los 22 del Barcelona El Palau Sant Jordi era el encargado de acoger tal evento, uno de los mayores del baloncesto español y continental. Y los 17.000 espectadores allí reunidos no sabían el gran espectáculo que se disponían a presenciar. Par-ti-da-zo como diría Pepu Hernández. Además la gran final entre la gran rivalidad de la liga española. El encuentro comenzó de una manera atípica en las finales, de forma muy agresiva. No se apreciaba esa cierta timidez entre los dos equipos en los que se suelen tantear, medirse unos a otros. Los blancos comenzaron intensísimos, con un gran Carlos Suárez buscando jugadas al poste bajo y Sergio Llull dirigiendo magistralmente a su equipo, haciendo daño a la defensa blaugrana. El Real Madrid parecía que salía a comerse al Barcelona, buenas jugadas en ataque, escogiendo bien los tiros y una intensidad altísima en defensa, sabiendo parar las mejores bazas del oponente; N’Dong, Lorbek y Navarro. Pero el partido no había hecho más que comenzar, y también los culés consiguieron sumar para no despegarse demasiado en el marcador. El Barcelona estaba aturdido, pero no noqueado. El Madrid dominaba claramente el encuentro, pero no mataba al rival, como ya había pasado en ocasiones anteriores. Con este guión, se llegaba al descanso con un 33-42 tras un triple de Llull sobre la bocina. El partido parecía decantarse para los blancos, pero a la salida de vestuarios el Regal F.C Barcelona se apretó los machos en defensa, y de la mano de Lorbek desde 6,75 y Boniface N’Dong en la pintura consiguieron apretar el marcador hasta el 51-52. Pero no iban a ser los únicos nombres propios del encuentro. Jaycee Carroll comenzó su recital desde la línea del triple. Creando constantes problemas a la defensa del Barcelona, parecía que todos sus tiros acababan en canasta. Además hacían crecer la moral de los blancos, que veían como se despegaban en el marcador, siempre comandados por Sergio Llull, que seguía con su particular recital desde el puesto de base. Ni Marcelinho Huertas ni Victor Sada conseguían pararle, y sus puntos y asistencias daban alas a su equipo, y no les permitían bajar el nivel en ningún momento. El Real Madrid era casi perfecto en ataque y en defensa, sin conceder canastas fáciles, y con todo su banquillo rindiendo a la perfección; Begic, Reyes, Velickovic, Begic… ninguno desentonaba en la orquesta madridista. Desde el minuto uno hasta el cuarenta. El Barça, se sentía incomodo en todo momento en el choque, viendo como pasaba el tiempo y la distancia era cada vez mayor. Algún chispazo de Juan Carlos Navarro era insuficiente. El Real Madrid quería reflejar que volvían a dominar y poner la puntilla, y lo hicieron gracias de nuevo al acierto de Llull (23 puntos y 5 asistencias) y Carroll (22 puntos y 27 de valoración) que finiquitaron el partido, mientras el Palau coreaba “¡¡MVP, MVP!!” al jugador menorquín. Con 20 de diferencia a favor de los blancos, la afición madridista era una fiesta. El primer duelo de altura entre Laso y Pascual, se lo llevaba el primero contra todo pronóstico. Hasta pudo disfrutar unos segundos de la victoria en el partido Jorge Sanz, canterano madridista, reflejo de la ilusión y emoción. Se llegó al final con la segunda máxima diferencia en una final copera de todos los tiempos, el marcador acabó 74-91. Gran anotación ante la mejor defensa de Europa, en un partido casi perfecto del Real Madrid, y que vuelve a conseguir el título 19 años después.