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PSOE

El PSOE hace autocrítica mientras busca un líder para el partido

Por Silvia Álvarez-BuyllaTiempo de lectura4 min
España27-11-2011

El 20-N ha dejado a un PSOE derrotado. Tras conseguir el peor resultado de su historia de la democracia, el partido socialista ha celebrado este fin de semana un Comité Federal para hacer autocrítica y analizar el porqué del batacazo. La gran incógnita es quién va a ocupar la Secretaría General del partido a partir de febrero cuando se convoque el Congreso Federal en Sevilla. El PSOE se enfrenta a una división interna entre los partidarios de Rubalcaba, los de Chacón y los que prefieren que se convoquen primarias. Descartado esto último, los socialistas facilitan la presentación de candidatos y rebajan a un 10 por ciento los avales requeridos para adquirir ese puesto.

El PSOE no pasa por un buen momento. Los 110 diputados conseguidos frente a los 186 del grupo Popular marcan un antes y un después en el Partido Socialista. El PSOE tiene claro que toca renovarse, cambiar y hacer autocrítica para recuperar los votantes que han perdido por la gestión de José Luis Rodríguez Zapatero. Además, el indulto al número 2 del Banco Santander, condenado por el Tribunal Supremo, la renuncia de José Blanco a ser número 2 del partido y su supuesta implicación en el Caso Campeón, entre otras cosas, hacen que el PSOE esté perdiendo la confianza de los ciudadanos. Por este motivo, este fin de semana se ha celebrado un Comité Federal en el que los socialistas han analizado los porqués de la gran derrota en las elecciones. Según José Luis Rodríguez Zapatero, esta última campaña electoral “ha sido muy difícil” y cree que la “principal explicación de estos resultados reside en las consecuencias singularmente adversas de la crisis económica”. Aún así, matiza que “siendo esta la causa principal, ello no quiere decir que con ocasión de la gestión de la propia crisis” no hayan “cometido errores” de gestión y de comunicación”. De la misma forma, Alfredo Pérez Rubalcaba recalca que “el resultado es malo” y reitera que todo “ha estado directamente influido por la crisis económica “que “ha conducido a unas elecciones también monográficas, en las que los ciudadanos sólo pensaban en clave de crisis y de desempleo”. No obstante, cree que debe hacerse una autocrítica y tratar de “fortalecer institucional y políticamente” el Partido Socialista. Chacón versus Rubalcaba El partido, además de hacer frente a un análisis y a un cambio, tiene como tarea buscar al nuevo Secretario General que saldrá elegido en el próximo Congreso Federal que tendrá lugar los días 3, 4 y 5 de febrero en Sevilla. De momento, Alfredo Pérez Rubalcaba no anuncia si se presentará o no como candidato y mientras tanto surgen nuevas voces que quieren optar a ese mismo puesto. La favorita (después de Rubalcaba) es Carmé Chacón que en su día ya quiso ser la candidata a sustituir a Zapatero, pero que se echo atrás para no perjudicar al PSOE. Todavía no ha confirmado que quiera presentarse, pero según fuentes de Europa Press Chacón se lo ha comunicado a varios dirigentes de su partido. Dos propuestas muy distintas: la de Rubalcaba, un ya experimentado político que ha trabajado con Felipe González y que ha sido la mano derecha de Zapatero en estos últimos años frente a una Carme Chacón, más joven y con menos experiencia, pero que podría dar un aire nuevo al socialismo. El PSOE se enfrenta así a una división interna entre los partidarios de uno y otro y facilita también que se presenten nuevos candidatos a liderar el partido socialista. De hecho, en esta ocasión quienes pretendan liderar el partido podrán hacerlo con el aval del 10 por ciento de los miembros de Comité Federal y no del 15 por ciento, como estaba previsto. Además, pueden optar a la Secretaría General consiguiendo de manera directa el 20 por ciento de los avales de los delegados del Congreso Federal. Descartada la propuesta de Tomás Gómez de convocar primarias Asimismo, el líder de los socialistas madrileños, Tomás Gómez, ha pedido que los afiliados pudieran elegir en primarias a su secretario, pero el PSOE ha rechazado su propuesta, sólo apoyada por el ex presidente extremeño Juan Carlos Rodríguez Ibarra, porque sería necesario cambiar los estatutos. Ibarra también ha hecho autocrítica y ha pedido la dimisión de toda la dirección del partido por los resultados del 20-N. En contra de Gómez y Tomás, estaban el secretario general de los socialistas andaluces, José Antonio Griñán; el secretario general de los socialistas de Castilla y León, Óscar López; y líder de los socialistas asturianos, Javier Fernández, entre otros. Este último ha recordado que el PSOE ya prevé primarias, pero para elegir a sus candidatos electorales y no para su secretario general. El PSOE tiene un largo camino por delante para tratar de recuperar al partido, nombrar un secretario general que logre captar de nuevo a los votantes de izquierda y procurar unir a los miembros en una misma dirección. De momento, la crisis interna, el batacazo en las elecciones y la ausencia de un liderazgo claro piden al partido tiempo para reflexionar y para cambiar.