ETA

La condena a Otegi podría complicar el fin de la banda terrorista

Por Javier M. Fandiño2 min

España18-09-2011

El fallo de la Audiencia Nacional que condena a Arnaldo Otegui, ex portavoz de Batasuna, y a Rafael Díez Usubiaga, ex secretario general del sindicato LAB, por seguir órdenes de ETA para reconstruir la ilegalizada Batasuna a través del organismo político Bateragune, podría complicar el fin de la banda terrorista. Mientras que PP y PSOE han mostrado su satisfacción por la sentencia del tribunal, gran parte de la sociedad teme represalias por parte del grupo terrorista.

Cuando el pasado mes de julio dos peritos de la Unidad Central de Inteligencia de la Policía comenzaron a aportar las primeras pruebas incriminatorias que señalaban a Bateragune como “la codirección política” de la banda terrorista ETA, no fueron pocas las voces que mostraron su temor a un retroceso en la pacificación del País Vasco si la justicia emitía una sentencia condenatoria a los miembros de la “nueva Batasuna”. La Audiencia Nacional ha condenado a diez años de prisión al ex portavoz batasuno Arnaldo Otegi y al ex secretario general del sindicato LAB, Rafael Díez Usabiaga, por su pertenencia a la banda terrorista ETA. La resolución del ‘caso Bateragune’ también ha llevado a la cárcel a otros tres miembros de la banda, Miren Zabaleta, Arkaitz Rodríguez y a Sonia Jacinto. No obstante, la condena a Usabiaga no ha sido notificada oficialmente y la Audiencia Nacional deberá decidir el próximo lunes sobre su ingreso en prisión a la espera del recurso ante el Supremo. La reacción de la clase política ha sido tan diversa como predecible y mientras que el líder popular, Mariano Rajoy, ha mostrado su satisfacción ante la decisión de la Audiencia Nacional y ha reconocido que el fallo “debilita a la gente que ha estado apoyando a la banda terrorista”, el candidato socialista a las elecciones generales, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha intentado calmar a la población ante los temores de represalias por parte de la banda armada. En unas declaraciones realizadas a Onda Cero, el ex ministro de Interior ha reconocido que “las manifestaciones en contra de la decisión del tribunal son esperables”, pero que descarta cualquier tipo de venganza. Por su parte, el Gobierno ha rechazado hacer cualquier tipo de juicio valorativo sobre la decisión de la Audiencia y su portavoz, José Blanco, declinó hasta siete veces durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros opinar sobre el fallo del tribunal. “No se pueden mezclar temas”, reconoció. El lugar del terrorista es la cárcel La decisión de la Audiencia Nacional ha coincidido con la celebración del VII Congreso Internacional sobre Víctimas del Terrorismo, que concluyó el sábado en París y llegó a reunir durante cuatro días a 450 representantes de 35 países. El presidente del Tribunal Supremo, Carlos Dívar, concluyó el acto asegurando que “al terrorista, en su puesto, en su sanción; no hay rencor, pero humanamente tiene que estar en su sitio, y este no es otro que la cárcel”. Aunque consideró “deleznable” que todavía exista gente que pretenda imponer sus ideas por medio de la violencia, prefirió no opinar sobre la decisión de la Audiencia, porque todavía puede ser recurrida.