Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

Memoria histórica

El Diccionario Biográfico Español levanta polémica

Por Caterina CrespoTiempo de lectura3 min
Cultura31-05-2011

El pasado jueves se publicó la mitad del trabajo realizado por la Real Academia de la Historia. Y este lunes empezaron a dejarse oír las primeras voces en contra del contenido de la memoria. La ministra de Cultura, González-Sinde ha afirmado que «hay un campo importante en el que se va a poder mejorar» y cree que en la siguiente tanda de 25 tomos y la edición «on-line» se modificarán. Además piensa que en la obra total faltan mujeres. Esta obra reúne más de 40.000 biografías de personajes de todos los ámbitos y todas las épocas, que han sido realizadas por más de 5.000 especialistas. Representantes de la Asociación de Descendientes del Exilio Español presentarán una denuncia al Ministerio de Educación por el Diccionario Biográfico Español realizado por la Real Academia de la Historia (RAH). Entre ellos se encuentran Carmen Negrín (nieta de Juan Negrín), Ángel Viñas (historiador), Carlos Jiménez Villarejo (jurista), Mirta Núñez Díaz-Balart (investigadora de la represión) y numerosos familiares de víctimas de la represión franquista y Asociaciones de la Memoria Democrática.

En una carta remitida al ministro de Educación, Ángel Gabilondo, la Asociación de Descendientes del Exilio Español muestra su "estupefacción" por que la publicación electrónica del Diccionario Biográfico Español, financiado con una subvención de este Ministerio y también con una ayuda del Plan Avanza del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, contenga "diversas biografías referentes al dictador Francisco Franco y personajes de la Historia reciente como Don Manuel Azaña, Don Juan Negrín, Don Francisco Largo Caballero, etcétera" que, a su juicio, "no se corresponden con los hechos históricos, en un intento de reescribir la historia”. Piden al mismo tiempo que se denieguen nuevas ayudas y se exija a la Real Academia de la Historia "que retire esas biografías y otras que pudieran incurrir en la falsificación histórica". Por su parte el presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), Emilio Silva, ha censurado este martes a la Real Academia de la Historia, por omitir partes de verdad y utilizar una terminología errónea. Como llamar autoritarismo a una dictadura que para ellos fue totalitaria y además han ido más allá y critican que éste fue "un sistema asesino, fundado y sostenido gracias a la violencia" y eso no se refleja. Además ha vuelto sobre la mesa, el proceso contra el ex magistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón por su instrucción del sumario sobre los asesinatos del franquismo y con el hecho de que las víctimas del régimen sigan sufragando con sus impuestos el mantenimiento del Valle de los Caídos. Además Por otra parte, en la biografía realizada por el académico Carlos Seco Serrano de Juan Negrín, la Asociación dice que "se le calumnia tratándolo como un jefe de Gobierno, prácticamente dictatorial, y añade que Manuel Azaña se vio anulado por la iniciativa revolucionaria de las sindicales obreras armadas; “pero se le mantuvo en el poder para que llenase, de cara a Europa, la imagen de un republicanismo democrático que estaba muy lejos de reflejar la auténtica realidad de España en aquellos momentos”. Contenido que no le ha gustado nada a Izquierda Unida. El ex consejero catalán y senador de ICV en la Entesa Catalana de Progrés, Joan Saura, ha presentado una batería de iniciativas en el Senado en contra del Diccionario Biográfico Español por entender que manipula la historia de personajes como Francisco Franco y recopila "ideas que forman parte del pensamiento fascista español", por lo que entre otras propuestas, el exconsejero autonómico plantea la retirada de los 25 tomos editados de esta obra y que se suspenda la edición de los 25 restantes. De algún modo parece que la política se está inmiscuyendo en la cultura. La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, ha sumado su voz a las críticas de algunos historiadores como Paul Preston, Santos Juliá, Manuel Viñas y Julián Casanova, contra algunas entradas del Diccionario Biográfico Español (DBE). Entre otras reivindicaciones, esperan que se añada el término dictador asociado a Franco, puesto que el académico Luis Suárez, autor de esta entrada en el BDE denomina «Generalísimo o Jefe de Estado». También critican que se señale, como ocurre en el libro, que Franco se hizo famoso por demostrar «un frío valor que sobre el campo desplegaba», o que «montó un régimen autoritario pero no totalitario».