Movimiento 15 de Mayo
La campaña electoral del 22-M, afectada por el movimiento Democracia Ya
(FOTO: www.democraciarealya.es)
Por Caterina Crespo2 min
Sociedad18-05-2011
El movimiento 15 de mayo representa a una gran mayoría de ciudadanos que se encuentra en una situación límite. Casi cinco millones de parados, pésimas gestiones públicas, quiebra de las bancas y demás problemas sociales. Los políticos y medios de comunicación tratan la noticia con cierta cautela porque una movilización así que lleva desde este domingo hacía mucho que no se veía en España. Todo viene dado por las próximas elecciones y el panorama desolador que se presenta. Está claro que para los socialistas, aunque, según parece, muchos de los manifestantes se encuentran en la izquierda más radical, les podría venir mal para los resultados.
Hay que recordar que los jóvenes duermen y viven en la madrileña Puerta del Sol, en la calle, que muchos han aprovechado para hacer botellón y otros para discutir de política. Piden democracia y cambios. Y tachan de farsa toda la política que “nos venden”. Esta manifestación empezó siendo intervenida por la Policía y ahora tiene en mente llegar hasta el Congreso de los Diputados para ver si desde allí pueden cambiar las cosas. La clave de todo el movimiento lo tienen las redes sociales según han explicado. Internet les ha enseñado que pueden satisfacer su demanda y su interés personal. De la misma forma que empezaron las revueltas árabes. Los asentados piden concentraciones continuas para hacer presión. Por su parte, la Junta Electoral Provincial de Madrid desautorizó la concentración convocada para este miércoles por la tarde en la Puerta del Sol para reclamar los cambios políticos y sociales que propone el denominado Movimiento 15 de Mayo. La Junta cree que: "no se considera que concurran causas extraordinarias y graves que justifiquen la urgencia de la convocatoria solicitada en un espacio de 24 horas". La Junta Electoral considera, además, que "la petición del voto responsable", a la que hacen referencia los convocantes, "puede afectar a la campaña electoral y a la libertad del derecho de los ciudadanos al ejercicio del voto". Desde la oposición, la número tres del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, ha expresado el respeto de su partido hacia los manifestantes juveniles y ha aprovechado para apuntar al PP como una solución a sus reivindicaciones. Ha expresado además que "los manifestantes tienen todo el respeto. Comprendo que en un país con un 45 por ciento de paro juvenil la gente se indigne" y que en el 95, los jóvenes tenían una situación similar y por tanto los entiende y cree que hay que cambiar las cosas y hacer reformas. Ha recalcado que la gente joven de este país tiene futro haciendo referencia así a las elecciones. También el vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, en su opinión, son la expresión de un "pueblo cansado" de la crisis y de millones de parados que pide a "gritos" un cambio y una "esperanza". Los portavoces de la acampada de Madrid han reconocido que no representan a ningún partido político, que animan a todos a seguir luchando por una “democracia real”. El movimiento que en un principio se inició en Madrid se está empezando a sentir en otras ciudades de España. El principal problema es que no tienen un plan marcado de soluciones o de propuestas de cambio.