TOROS
El Juli, en hombros en la Feria de Fallas
Por Almudena Hernández Pérez2 min
Espectáculos17-03-2002
Julián López El Juli se ha consolidado como el máximo triunfador de la primera semana de la Feria de Fallas y apunta serlo de todo el serial. El torero madrileño salió en hombros el viernes 15, después de sumar dos orejas.
En el resto de festejos el olor a la pólvora de la fiesta valenciana ha podido en muchos momentos, ya que dentro del coso el arte no era comparable con el que se mostraba en forma de cartón en cualquier rincón de la ciudad del Turia. Sin embargo, los valencianos no se pueden quejar. En esta semana de toros ha habido espectáculo, orejas y esos buenos detalles que el aficionado habitual sabe apreciar en medio de la nada. Los novilleros anduvieron el lunes en lo que son, demostrando además que quieren ser más y llegar lejos. Por eso Matías Tejela y César Jiménez cosecharon dos orejas cada uno ante los encastados novillos de Fuente Ymbro. En el capítulo de matadores, el veterano Luis Francisco Esplá, siempre sabio, arrancó una oreja a un ejemplar de Ana Romero, lidiado en la tarde del miércoles. Otro trofeo se hizo merecer Francisco Rivera Ordóñez frente a su primer oponente de Jandilla en la corrida del jueves. El sábado, con la expectación a flor de piel y el olor a pólvora en el aire, Miguel Abellán ganó el marcador a José Miguel Arroyo Joselito y a José Tomás, pues cortó una oreja en una tarde en que en el capítulo ganadero hubo de todo, con remiendos incluidos. De nuevo la expectación llegó el domingo, pues El Juli regresaba con el aval de ser el único matador en lo que iba de feria que había salido en hombros en Valencia. Lo hizo el viernes, día en que redondeó dos faenas que la presidencia valoró con una oreja. En la misma tarde, Enrique Ponce, que estaba en su plaza, replicó la hazaña y también tocó pelo. Pero, pese a la expectación, la tarde del domingo no pintó en oros para ninguno de los diestros que hicieron el paseíllo. Joselito y El Juli fueron silenciados y Manuel Caballero escuchó las únicas palmas del público valenciano. Olía más a fiesta fuera del coso, donde los toros de Daniel Ruiz no facilitaron tampoco el lucimiento artístico.