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MUNDOBASKET FEMENINO

Las chicas de bronce

Por David del OlmoTiempo de lectura3 min
Deportes04-10-2010

La selección española de baloncesto femenino completó en la República Checa la mejor actuación en un Campeonato del Mundo de toda su historia. Liderada por Amaya Valdemoro y Sancho Lyttle (elegida dentro del mejor quinteto del Mundobasket), España se colgó la medalla de bronce tras dejar para el recuerdo una remontada increíble en los cuartos de final ante Francia y una gran actuación en el duelo por el tercer puesto frente a Bielorrusia.

El equipo femenino de España había logrado la quinta plaza en el Mundial de Alemania 1998 y China 2002, mientras que en sus otras dos apariciones en la cita que se celebra cada cuatro años, se había clasificado octava en Australia 1994 y Brasil 2006. A partir de ahora podrá presumir de una medalla de bronce ganada con todos los honores tras un Mundial en el que sólo la todopoderosa selección de Estados Unidos (que superó a las de José Ignacio Hernández, gran mérito el suyo también, en las semifinales), oro a la postre y la República Checa (España había ganado a las anfitrionas en la segunda fase por 20 de diferencia –Estados Unidos pudo con ellas por 30 en la final-), plata, quedaron por encima en el podio. Y las españolas pueden decir que Rusia, Australia (a priori era la máxima rival de las estadounidenses por el oro) y Francia (campeona de Europa), quedaron por detrás de esta magnífica generación que para siempre aparecerá en la historia del baloncesto español. Tras superar la primera fase con un pleno de tres victorias, en la segunda ronda (octavos de final), ganaba en primer lugar a la floja selección japonesa (59-86) con 29 puntos y 11 rebotes de Lyttle, pívot ante la que nada pudieron hacer las interiores niponas. Después el escollo fueron las anfitrionas (solventadas por un claro 77-57), en un partido en el que desarbolaron totalmente a su rival, con una líder como la veterana Valdemoro que ya tomaba los galones del equipo. Y sólo Rusia en un par de minutos fatales en el último cuarto de las españolas (y también la gran Becky Hammonm, con sus 27 puntos), que concedieron nueve puntos que acabarían siendo decisivos (el marcador final fue de 76-67), pudo con las bravas jugadoras de La Roja. La suerte estaba decidida y el camino hacia la medalla quedaba marcado con Francia como primer escollo. Las españolas afrontaron el duelo con excesiva precipitación en diversas fases, lo que parecía que les iba a costar el triunfo. España empezó el último periodo con un desfavorable 52-43 y, a base de impulsos, se acercaba a una distancia salvable, pero las francesas, con menos errores, volvían a distanciarse. El tiempo se acababa y el futuro de las españolas parecía abocado a luchar por la quinta plaza. A 35 segundos del final, Céline Dumerc, la mejor jugadora francesa, colocaba el 64-58. Pero en ese tiempo Amaya Valdemoro lograba un triple estratosférico, sumaba dos tiros libres, la gala Endéné Miyem fallaba un tiro libre y Valdemoro conseguía una bandeja sobre la bocina para forzar la prórroga (65-65). Impresionante final. En el tiempo suplementario Amaya no anotó (lo hicieron la jovencísima Alba Torrens, la pívot Cindy Lima (lesionada Lyttle tomó la responsabilidad interior) y Anna Montañana (que no cuajó un buen partido, pero no falló en el momento clave con los dos tiros libres definitivos). En semifinales, ganar a Estados Unidos era una quimera y el seleccionador español dio minutos a sus jugadoras, reservando a Lyttle. 106-70 y el último día llegaba el partido histórico. Ante Bielorrusia (rival a la que ya había ganado en las semifinales del Europeo de 2007 en Italia y en esta misma lucha por el bronce en el de Letonia del año pasado), España logró un 28-15 de inicio (77-68 al final) y mantuvo su intensidad y acierto (además de las habituales brilló Torrens, con 19 puntos), con un 58% en triples y ganó el rebote a un rival más alto. Un bronce de justicia para una selección de las que hace vibrar a sus seguidores.