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ECUADOR

Correa afirma que no habrá perdón para los que quisieron matarle

Por Juan Heralta RodríguezTiempo de lectura2 min
Internacional03-10-2010

“No habrá perdón”. Esa fue la primera declaración del presidente de Ecuador, Rafael Corea, tras los incidentes del pasado jueves. Según Correa, se trataba de un plan organizado para acabar con su vida con el único objetivo de conseguir un golpe de estado. La comunidad internacional le ha mostrado todo su apoyo.

Tajante y rotundo. Así se ha mostrado el presidente de Ecuador, Rafael Correa, al afirmar que "aquí no habrá perdón, ni olvido" en relación a la revuelta que tuvo la Policía contra él. De esta manera, Correa impondrá duras sanciones a todos aquellos que “deshonraron el uniforme policial”, impidiendo así que tenga lugar “lo que ocurrió en Honduras". "A nuestra democracia nada ni nadie la va a tumbar”, añadío Correa. El presidente ecuatoriano volvió a insistir en que varios policías sublevados intentaron acabar con su vida el pasado jueves. Quiso dejar clara esta teoría al afirmar que su vehículo recibió cinco impactos de bala, al igual que los cuatro vehículos que llevaban a toda su comitiva. Además de afirmar que cuenta con unas grabaciones en las que se puede apreciar como grupos políticos infiltrados en la Policía" arengaron a los agentes y organizaron el levantamiento. Pese a todo, Correa no creé que en un futuro pueda haber un posible golpe de Estado, ya que considera que tiene bastante apoyo del pueblo ecuatoriano. Es por eso que lo ve “muy difícil”, aunque no lo descarta del todo, debido a que piensa que hay grupos “muy minoritarios pero muy organizados, muy astutos, algunos a veces manejan la fuerza, ¿pero qué puede hacer un gobernante?". Durante su reunión con los cancilleres de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), afirmó que toda la operación estaba coordinada. Puesto que piensa que “ciertos voceros de la oposición ya tenían listo el acuerdo de que para liberar al presidente tenía que declarar la amnistía de todos los involucrados en esto, derogar la ley que querían que derogue y otra ley que querían que derogara la derecha de este país". A lo que añadió que la Policía había organizado varios grupos de apoyo al ciudadano ya que “esperaban que todo el pueblo se levante", algo que finalmente no sucedió. Según Correa el único objetivo que querían era crear el caos, una guerra civil, una matanza y desestabilizar al Gobierno". La comunidad internacional le ha querido mostrar todo su apoyo. Instituciones como la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) o la Organización de Estados Americanos (OEA) y países como Chile, Brasil, Venezuela o Argentina, entre otros, han expresado su respaldo al presidente. Al otro lado del charco, Herman Van Rompuy, el presidente permanente del Consejo de la UE, quiso unirse a estas muestras de afecto mostrándole todo el apoyo de la Unión Europea a su Gobierno a través de un comunicado. De manera personal, lo quisieron hacer también España y Francia.