RETIRADA DE IRAQ
La primera medida de Zapatero fue retirar las tropas de Iraq para desafiar a EEUU
Por J. F. Lamata3 min
Internacional01-09-2010
Las primeras grandes medidas que tomó Zapatero cuando llegó al poder fue el establecimiento de la unión homosexual incluyendo la posibilidad de la adopción por parte de la pareja y la retirada de las tropas de Iraq. Esta última se produjo después del 11-M, del rechazo social al inicio de la guerra en Iraq y el desplante de Zapatero a EEUU como la negativa a levantarse ante el paso de la bandera de EEUU en el desfile militar del 12-O.
El 21 de abril de 2004 estaba previsto que el segundo contingente de tropas español fueran relevado por el tercero que iba a encabezar el general José Muñoz Muñoz. El 18 de abril aquel contingente quedó suspendido, porque el presidente del Gobierno anunció aquel día a las 18:30 la retirada de las tropas. El comunicado oficial decía así: "Una vez que el ministro de Defensa, hoy presidente del congreso, José Bono, ha jurado su cargo le he dado la orden de que disponga lo necesario a fin de que las tropas españolas destinadas en Irak regresen a casa en el menor tiempo posible y con la mayor seguridad posible". "Con la información de que disponemos y que hemos recabado a lo largo de las últimas semanas, no es previsible que se vaya a adoptar una Resolución de la ONU que se ajuste al contenido al que quedó condicionada nuestra presencia en Irak. (...) Tanto las manifestaciones públicas de los principales actores implicados en este conflicto, como los contactos mantenidos por el Ministro de Defensa a petición mía en el curso del último mes, no aportan indicios que permitan prever una variación sustancial en la situación política y militar existente en Iraq en los plazos previstos y en el sentido reclamado por el pueblo español. Estas circunstancias me han llevado a adoptar la decisión de ordenar el regreso de nuestros soldados con la máxima seguridad y, por consiguiente, en el menor tiempo posible. Esta decisión responde, antes que nada, a mi voluntad de hacer honor a la palabra dada hace más de un año a los españoles. El Gobierno, animado por las más hondas convicciones democráticas, no quiere, no puede y no va a actuar en contra ni de espaldas a la voluntad de los españoles. Ésta es su principal obligación y es también su principal compromiso. (...) La decisión responde también al propósito de contribuir a la lucha que libra la Comunidad Internacional contra el terrorismo desde el más estricto respeto a la legalidad internacional. El Gobierno español seguirá apoyando firmemente la estabilidad, la democratización, la integridad territorial y la reconstrucción de Iraq, y de acuerdo con este principio promoverá cuantas actuaciones de Naciones Unidas y de la Unión Europea ofrezcan un marco de cooperación internacional que contribuya eficazmente a que los iraquíes recuperen su soberanía y puedan organizar, libre y democráticamente, sus elecciones para construir su propio futuro en paz, independencia y seguridad". Promesa electoral estrella En febrero de 2004, en medio de la campaña electoral Zapatero afirmó que "ordenaría el regreso de las ropas españolas en Irak si la ONU no se hacía cargo de la situación política y militar". El Gobierno hizo todo lo posible por evitar entonces que se relacionara aquella retirada con la matanza del 11-M, aunque desde el entorno del Gobierno se insistía en la idea de que aquel atentado era ocnsecuencia de la participación en aquella conflagración. Entre las primeras reacciones de apoyo a aquella decisión estuvo el entonces presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, Venezuela, Hugo Chávez y la organización político-armada Hamás. Poco después de aquella decisión a José Bono le fue conedida una medalla que optó por declinar. La guerra costó 11 muertos a los españoles. 7 de ellos perecieron en un brutal atentado producido el 30 de noviembre de 2003, cuyos cadáveres fueron pisoteados por iraquíes al grito de "viva Sadam". Hay otros lugares donde los españoles han sufrido bajas en los últimos años. Por ejemplo en Bosnia-Herzegovina murieron 20 perosnas, en Kosovo 7, en el Líbano 6, en Guinea 3, uno en Abu Dhabi, uno en Albania, uno en Macedonia, uno en Indonesia, y uno en el Golfo Pérsico.