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LIBERACIÓN DE DOS COOPERANTES

Historia del más largo secuestro de Al Qaeda

Por LaSemana.esTiempo de lectura2 min
Sociedad23-08-2010

El 29 de noviembre de 2009 fueron secuestrados tres cooperantes españoles a 150 kilómetros de Nuakchot, en Mauritania. Quince días después, La célula de Al Qaeda en el Magreb AQIM, reivindicaba el secuestro de Roque Pascual, Albert Vilalta y Alicia Gámez y exigía el pago de un rescate monetario para liberar a los españoles.

Un mes después del secuestro, el 29 de diciembre de 2009, el Gobierno español informó de que Albert Vilalta recibió tres disparos en la pierna izquierda al intentar escapar en el momento del secuestro. Sin embargo, el ministerio de Exteriores aseguró que el rehén recibió atención médica tras el tiroteo. Poco a poco iba llegando información de que los cooperantes seguían con vida. El día 15 de enero, el Gobierno español reconoció que habían visto un video enviado por los terroristas antes de navidad como “prueba de vida” de los rehenes españoles. Un convulso mes de febrero dio paso a la liberación de un botánico francés que también estaba retenido por los terroristas y que fue puesto en libertad tras varias amenazas de muerte y tras la excarcelación de varios presos islamistas en la prisión de Kati, cerca de Bamako. En este mes, también se produjeron varios acontecimientos políticos, como la retirada de los embajadores en Malí de Mauritania y Argelia, a modo de protesta contra la liberación de cuatro presuntos terroristas implicados en atentados perpetrados en Argel. El 5 de marzo, Al Qaeda amplía sus demandas y además del rescate económico exige la liberación de presos de la organización en Mauritania para la liberación de los tres cooperantes españoles. Por fin el día 10 de marzo la organización islamista libera a Alicia Gámez, tras más de tres meses de secuestro. Según un comunicado difundido por los terroristas, la cooperante española fue puesta en libertad porque se convirtió al islam y por sus graves problemas de salud. Sin embargo, condicionó la seguridad de los otros dos rehenes a que se satisfagan sus exigencias. Desde marzo hasta el 23 de agosto de 2010, han tenido que pasar cinco meses para que los terroristas liberasen a Roque Pascual y Albert Vilalta. La intermediación y las negociaciones han sido muy largas, con numerosas dificultades por el camino. El Gobierno español ha tenido que pagar varios millones de euros para que fueran puestos en libertad. De pronto, un domingo de agosto, saltaba la alerta. Los terroristas estaban llevando a los dos cooperantes españoles para ser entregados a un intermediador. Desde ese momento hasta que el presidente José Luis Rodríguez Zapatero confirmaba la liberación, pasaban casi 24 horas. Un avión del Ejército español los traía de vuelta a España para reencontrarse con sus familias.