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MELILLA

Aznar visita por sorpresa la frontera de Melilla

Por LaSemana.esTiempo de lectura2 min
España18-08-2010

¿Valentía o provocación? Este es el interrogante que ha abierto la visita del ex presidente del Gobierno José María Aznar a Melilla. En plena controversia con Marruecos por los incidentes en la frontera, ha querido dar su apoyo a los vecinos de la ciudad y a las Fuerzas de Seguridad. Sin embargo, el PSOE lo considera una irresponsabilidad.

Aznar se ha presentado por sorpresa en Melilla horas después de que el Partido Popular enviase a la ciudad autónoma a su vicesecretario de Comunicación, Esteban González Pons. El ex presidente del Gobierno ha reivindicado la españolidad de este territorio africano, que algunas organizaciones marroquíes reivindican como suyo. La frontera ha sido el primer sitio al que se ha dirigido Aznar nada más llegar. Quería manifestar así su apoyo a los agentes de seguridad que trabajan en la zona y que se han visto atacados por organizaciones marroquíes radicales. Algunas de ellas, incluso, han hecho fotomontajes en los que se burlan de las mujeres policía que patrullan el paso fronterizo. Después, Aznar se ha entrevistado con el presidente de Melilla, Juan José Imbroda, quien le ha agradecido el gesto y ha criticado la pasividad del Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero ante los incidentes que se llevan registrando en la ciudad durante las últimas semanas. Aznar también ha lanzado un mensaje claro en defensa de los agentes españoles: "han sido duramente insultados o recriminados no precisamente desde lo que debe ser una política basada en la buena vecindad y buenos mensajes para establecer una más fluida relación y una más fluida interrelación dentro de lo que significan los perímetros fronterizos". El presidente de honor del PP ha obtenido el pleno respaldo de su partido. Mariano Rajoy sostiene que Aznar es un "ciudadano español" que tiene perfecto derecho a ir a Melilla para que sus vecinos comprueben que, ante la falta de medidas desde el Gobierno de Zapatero, "hay alguien que se preocupa por ellos". Sin embargo, la iniciativa de Aznar no ha gustado nada al Ejecutivo. El ministro de Fomento, José Blanco, ha arremetido duramente contra el ex presidente del Gobierno al acusarle de incurrir en un acto de "deslealtad". Para Blanco, la presencia de Aznar en Melilla "no ayuda" a resolver las diferencias con Marruecos.