ALEMANIA
Merkel consigue la elección de su candidato a la Presidencia
Por Miguel Martorell2 min
Internacional01-07-2010
La canciller Angela Merkel ha logrado este miércoles que el Bundesversammlung, la Asamblea Federal alemana, eligiera a Christian Wulff, su candidato a la Presidencia del país, como nuevo jefe de Estado. Ha sido en una asamblea especial maratoniana, después de que varios díscolos de la coalición de centro derecha que dirige Merkel impidieran alcanzar la mayoría absoluta necesaria.
Las de este miércoles han sido las primeras elecciones presidenciales tras la Segunda Guerra Mundial en las que han sido necesarias tres rondas para elegir al jefe de Estado, que ostentará el cargo durante los próximos cinco años, con opción para ser reelegido para un nuevo mandato. El candidato de Merkel partía con desventaja. Su rival, Joachim Gauck, de 70 años, era un candidato independiente, muy popular entre la clase política por su activismo por los derechos civiles y por su oposición al régimen comunista en la antigua República Democrática de Alemania. Christian Wulff, por su parte, tiene 51 años y fue primer ministro del Estado de Baja Sajonia. Aunque en un momento pudo haber sido canciller, él mismo lo rechazó al no considerarse lo suficiente "macho alfa" como para ocupar un cargo que hoy por hoy ocupa una mujer. La elección de Wulff se produce después de que, el pasado mes de mayo, el anterior presidente, Horst Köhler, presentara su dimisión. La renuncia, que Merkel intentó revocar sin éxito, provocó una crisis política en Alemania, especialmente por la situación en la que se produjo. El motivo de la dimisión de Köhler no fue otro que unas polémicas declaraciones sobre la misión de las tropas alemanas en Afganistán en las que insinúo que el objetivo primordial era más económico y comercial que de pacificación o democratización del país asiático. Sin embargo, el anterior presidente ya arrastraba críticas de la clase política por su ausencia en algunos de los debates más importantes para el país, como el papel de las tropas en Afganistán, la crisis de la moneda europea o el escándalo por los abusos sexuales a menores en colegios del país. Además, en los últimos meses antes de su renuncia, Köhler había realizado distintas declaraciones que chocaban directamente con la coalición de democratras cristianos y liberales que le situó en el cargo.