ATENTADO EN FRANCIA
Jean-Serge Nérin, el primer gendarme asesinado por ETA
Por Juan Antonio Marín2 min
España20-03-2010
El primer policía francés asesinado por ETA era un hombre de 52 años que ejerció toda su carrera en la comisaría de Dammarie-les-Lys, en el departamento de Seine-et Marne, según cuenta Le Parisien. El martes por la noche, cuando este experimentado policía decidió interceptar a uno de los ladrones de coches en la localidad de Villiers-en-Bière, recibió varios disparos al tratar de impedir que los etarras robaran un coche en un concesionario de BMW.
Los terroristas abrieron fuego contra el policía francés, que pese a llevar chaleco antibalas, recibió el impacto de un proyectil que le alcanzó la axila y le destrozó la caja torácica. Falleció una hora después en el hospital. Nacido en Cayenne (Guayana), Jean-Serge Nérin tenía cuatro hijos: una hija de 32 años, uno de 18 años y dos mellizos de 16. Dentro de dos años, se iba a jubilar. Recibió después de 20 años de carrera la Medalla de la Policía Nacional y además, fue premiado por la gran gestión en su brigada. La muerte de este policía, mientras trabajaba, ha reavivado la ira de los policías del departamento de Seine-et-Marne, en pleno duelo por la muerte de otro compañero hace dos meses. Han perdido dos compañeros con experiencia, próximos a la jubilación, que conocían perfectamente su trabajo y las medidas de seguridad. Esta es la primera vez que un policía francés es asesinado por la banda terrorista ETA. Sin embargo, la historia reciente recuerda que éste no ha sido el único enfrentamiento entre los etarras y los gendarmes. De hecho, antes de este desafortunado acontecimiento ya se habían producido 13 enfrentamientos más entre los terroristas y la policía francesa. Los más graves son los que acabaron con uno o más agentes heridos de gravedad a causa de los disparos. Por ejemplo, el tiroteo ocurrido cerca de Monein en 2001, en el que dos etarras hirieron de gravedad a un gendarme que trataba de identificarlos; o el de Sauvagnon, en ese mismo año, en el que un gendarme recibió cuatro disparos desde una furgoneta que intentaba saltarse un control de tráfico. A partir de ahora el Gobierno francés trabajará con mayor decisión, si cabe, para colaborar con España en la lucha contra el terrorismo, lo cual pondrá las cosas mucho más difíciles a ETA, que dejará de tener en suelo francés un lugar cómodo dónde organizarse, tal y como había ocurrido hasta hace unos años. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, viajarán a París para asistir al funeral del gendarme asesinado, para condenar la violencia terrorista y para luchar junto con el Gobierno Francés contra una banda terrorista que tiene los días contados.