TRAS UN PRIMER RECHAZO DEL PP
Andalucía aprueba la primera ley en España a favor de la muerte digna
Por Alejandro Serrano2 min
Sociedad18-03-2010
Esta norma contó con el voto de los tres grupos de la Cámara autonómica (PSOE, PP e IU). No obstante, se encontraron con el rechazo parcial del grupo parlamentario popular a tres artículos de los 33 que conforman el nuevo cuerpo de ley. Finalmente ha salido adelante, aunque el PP ha optado por votar que no a esos artículos y que sí al resto del texto.
En estos tres artículos los populares querían que se concretara la composición de los comités de ética que se crearán en todos los centros sanitarios y, sobre todo, que la ley contemplara el derecho a la objeción de conciencia de médicos y enfermeras, a lo que PSOE e IU se han opuesto. La ley reconoce el derecho a recibir, o no si así lo desea el paciente, una información clínica veraz y comprensible sobre su diagnóstico, con el fin de ayudarle en la toma de decisiones. También se regula el derecho del paciente a recibir tratamiento para el dolor, incluyendo la sedación paliativa y cuidados paliativos integrales en su domicilio, siempre que no estén contraindicados. La persona afectada podrá igualmente rechazar o paralizar cualquier tratamiento o intervención, aunque ello pueda poner en peligro su vida. El texto también plasma que los profesionales sanitarios que atiendan al paciente en su fase terminal deberán respetar las decisiones que éste tome sin imponerle sus propias opiniones personales, morales, religiosas o fisiológicas. La consejera de Salud de la Junta andaluza, María Jesús Montero, defiende que la ley recoge el derecho de los pacientes que tengan que ser hospitalizados a una habitación individual durante su estancia, tanto en el ámbito público como en el privado, y a estar acompañados de sus familiares durante el proceso de la muerte. También ha querido hacer referencia a Inmaculada Echeverría, la tetrapléjica granadina que fue desconectada en un hospital del Servicio Andaluz de Salud (SAS) en marzo de 2007, asegurando que durante la redacción de esta ley, ha estado "siempre presente la memoria de Inmaculada”. En referencia a la objeción de conciencia, la parlamentaria popular Ana Corredera y portavoz del PP en tramitación de esta ley, ha constatado: "nosotros queremos asegurar la autonomía del paciente y el respeto a su voluntad en el momento de la muerte, pero creemos que eso es compatible con otras opciones que niega el Gobierno", quien también lamentó "no saber quien integrará los comités de estética asistencial en los distintos centros sanitarios", justificó, no obstante, que su grupo ha apoyado el resto de la ley, entre otros motivos "porque no se apoyan las prácticas de eutanasia". IU, tras felicitarse por la aprobación de la norma, ha pedido al Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero "que legisle y sea valiente en materia de eutanasia y suicidio asistido". La ley andaluza deja fuera estos dos supuestos, que son ilegales en España. "Ni se quiere ni se puede regular sobre esos asuntos", ha aclarado la socialista Rosa Ríos.