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POLÍTICA

La improvisación contra la crisis aviva las críticas internas en el seno del PSOE

Fotografía
Por Luis Miguel L. FarracesTiempo de lectura2 min
España18-09-2009

Los efectos de la crisis económica empiezan a notarse en el PSOE. La actuación del Gobierno contra la recesión provocó ya la primera derrota en unas elecciones a nivel nacional en las pasadas europeas, y la improvisación en las políticas amenaza con estallar en una crisis interna notable. Y es que fuera de Ferraz no gustan ni cómo se están repartiendo los nuevos cargos de responsabilidad, ni el aislamiento del PSOE en el Congreso, ni la falta de comunicación entre las distintas familias.

Se acabaron los buenos resultados. La pobre respuesta del Gobierno contra la crisis ha hecho caer, de manera firme y por vez primera, al PSOE en las encuestas de intención de voto. No es de extrañar que el mismo hecho de que el partido de Mariano Rajoy, un líder que ha sido derrotado en los dos últimos comicios nacionales, supere en las encuestas al deñ presidente del Gobierno aún teniendo peor valoración entre los ciudadanos, haya disparado las voces críticas en el interior del PSOE. Mientras en Ferraz parecen decididos a dar alas a una nueva hornada de políticos de dudosa formación pero que supuestamente dotan de frescura al partido, fuera de Madrid algunos responsables empiezan a cuestionar muy seriamente esta estrategia. En palabras de un dirigente del PSOE, recogidas la pasada semana por el diario El País, "las Leires y las Bibianas están sustituyendo a los Sevilla o los Jáuregui", o lo que es lo mismo, la imagen de radiante juventud, de optimismo y de supuesta vocación está arrinconando a los políticos solventes, preparados y con experiencia. Y justo ahora que, cuando España busca una salida de la crisis, lo que más falta debería hacer son tecnócratas. Pero el problema, según las voces críticas del PSOE, no es sólo que se esté apostando por ministros de perfil bajo. Lo peor es que el debate interno en el partido ha desaparecido. Zapatero habría optado en los últimos meses por una política expansionista de sus competencias razonables, la cual fue clave, según la corriente crítica, para provocar la salida de Economía de Pedro Solbes. Y es que el presidente del Gobierno habría decidido reformas fiscales y laborales importantes en los últimos tiempos sin contar con el exministro de Economía, cuyas competencias estaban reducidas a las de un mero consejero. Ahora, con la apuesta regeneracionista de Zapatero dando unos pésimos resultados, con personajes como Leire Pajín o Bibiana Aído haciendo las delicias de las plumas más satíricas, con un Congreso muy justito de amigos y con unas encuestas cada vez más desfavorables, el seno del PSOE pide un cambio de rumbo.