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CICLISMO

La montaña encumbra al nuevo líder de la Vuelta a España: Cadel Evans

Por Álvaro DíazTiempo de lectura4 min
Deportes06-09-2009

La Vuelta a España ha completado su segunda semana con tres cambios en el liderazgo de la general y un aperitivo de montaña que augura una altísima emoción para las futuras etapas. Fabian Cancellara arrancaba la jornada del domingo vistiendo el maillot amarillo. Antes, en la cuarta fecha, André Greipel le había arrebatado el primer puesto, una posición que el suizo recuperaba tras la contrarreloj del sábado. Pero en el último día de competición, que inauguró la alta montaña, Cancellara cedió el traje dorado a Cadel Evans.

La segunda semana de la Vuelta arrancó sobre 189,7 kilómetros entre Zutphen y Venlo. El día comenzó con una escapada muy temprana que el grueso de carrera controló a la perfección. Fabian Cancellara y Andy Schleck se encargaron de marcar el paso y guiar al pelotón por las numerosas rotondas del recorrido. En el ocaso de la etapa fue el Columbia quien movió filas para colocar a André Greipel -que debía suplir al ausente Mark Cavendish- al frente de la carrera. Sin embargo fue Greg Henderson quien tomó el mando del equipo y se adjudicó con la victoria de etapa. Así, las grandes piezas de la competición no sufrieron cambios relevantes en una clasificación, que seguía liderando Cancellara. Al día siguiente los 225,5 kilómetros de carrera, entre Venlo y Lieja, tuvieron un único protagonista: la lluvia. El día comenzaba de forma rutinaria, con un pelotón muy relajado que dejaba hacer a fugados como Javier Ramírez, Lars Boom o Dominik Roels. Unos aventureros que eran cazados tras la ascensión al Alto de Theux. A falta de 2, 5 kilómetros para el final, llegó el gran susto de la etapa. El agua acumulada sobre el asfalto, provocaba la caída de un corredor en cabeza, que a continuación se llevaba por delante a gran parte del pelotón. En cabeza sólo quedaron seis corredores. De ellos, tan sólo Greipel y Wouter Wylandt llegaron en condiciones de disputarse la victoria. Fue el primer corredor quien, tras un cómodo sprint, cruzó primero la meta. Con todo, Cancellara seguía al frente de la general, seguido por Tom Boonen. Tras una jornada de descanso, la Vuelta a España dejaba los frondosos verdes de los Países Bajos y se trasladaba al incisivo calor de Tarragona. El jueves daba comienzo la primera jornada en España -174 kilómetros hasta Vinarós-. La carrera sirvió ante todo para confirmar una regla que venía practicándose desde las primeras jornadas: el Columbia es el que mejor maneja las llegadas masivas a meta. Ni el Quick Step ni el Rabobank de Óscar Freire – que acabó séptimo la etapa-, lograron toser al Columbia. André Greipel fue así quien mejor controló un sprint, en el que Tom Boonen y Daniele Bennati lucharon igualmente por la victoria. Con su segundo triunfo, Greipel se hacía con el maillot oro, relegando a Cancellara a la tercera posición de la general. El segundo seguía siendo para Boonen. La etapa del viernes estuvo protagonizada por una prometedora escapada, que protagonizaron hombres como José Antonio López, Matheus Pronk o Bingen Fernández. Sin embargo, cuando sólo faltaban 20 kilómetros para la llegada a meta, el extraordinario impulso que imprimía el Columbia daba frutos: el pelotón engullía a los fugados. Los favoritos al sprint, Boonen, Bennati o Greipel, ya saboreaban la victoria. A todos ellos pilló de improviso el latigazo final de Borut Bozic. El esloveno lograba cruzar primero la línea del triunfo. No obstante, la clasificación general no variaba en exceso; Greipel seguía al frente. En la sexta etapa los corredores se enfrentaban a una contrarreloj de 30 kilómetros, desarrollada sobre tramos del Circuito urbano de Fórmula 1 de Valencia. Fabian Cancellara voló una vez más sobre el asfalto para hacerse con una rotunda victoria. David Millar conseguía el segundo mejor tiempo, y Bert Grabsch era tercero. Merece especial mención el buen hacer de los españoles David Herrero –el mejor de los nacionales, que logró ser cuarto en la crono-, y Samuel Sánchez –clasificado en sexto lugar-. Tras lo acontecido, el suizo del Saxo Bank recuperaba el traje de oro. Le seguían en la genera Tom Boonen y el español Herrero. La semana se cerró con una dura etapa que daba la bienvenida a la alta montaña. En total, la prueba constaba de 204 kilómetros entre Alzira y el Alto de Aitana. La fuga del día fue la encabezada por David Moncoutie y Johnny Hoogerland, que a punto estuvo de llegar a buen puerto. Los fugados se las prometían muy felices pero el ascenso al Alto de Aitana –que despojó, además, a Cancellara del maillot oro-, acompañado del aterrador ritmo que imponía el Caisse D´Epargne, hizo que los aventureros fuesen cayendo uno a uno. Sobre todo, cuando Damiano Cunego dejaba a sus rivales boquiabiertos con un latigazo final que nadie pudo contestar. Detrás del italiano llegaban Moncoutie y Robert Gesink. Finalmente hacía entrada el grupo de favoritos con Cadel Evans, Alejandro Valverde y Samuel Sánchez. Así, Evans se convertía en el nuevo líder de la vuelta, seguido muy de cerca por los dos españoles.