TEJIDO LABORAL

Diálogo social: el viaje a ninguna parte

Por J. F. Lamata Molina2 min

Economía26-07-2009

Durante estas semanas los diarios intentaban echar imaginación en sus titulares: “Continúa el culebrón del diálogo social”, titulaba uno; “¿Diálogo social?”, ponía otro en un interrogante irónico; “Diálogo de besugos”, decíamos la semana pasada. En los últimos días ha habido muchos amagos, propuestas, la filtración de un borrador y una cena, pero el resultado es el mismo: nada.

La esperanza de que la deseada foto del ministro Celestino Corbacho, la patronal representada por el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, y los líderes sindicales (el secretario general de la UGT, Cándido Méndez, y el de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo), en una escenificación que iría en portada de todos los medios y podría transmitir cierta tranquilidad, parece haberse quedado en papel mojado. La mesa de diálogo social que conforman Gobierno, empresarios y sindicatos retomó sus trabajos después de que el Gobierno aceptara la petición de la CEOE de aplazar la resolución. Pero lo cierto es que no ha habido grandes cambios, José Luis Rodríguez Zapatero tiene su propuesta: está dispuesto a bajar la cotización pero es el máximo que va a ceder a los patronos, de reforma laboral ni hablar. Tampoco los sindicatos están contentos, sacan su vena reivindicativa (no contra el Gobierno, sino contra la patronal) y dicen que no les vale la duración de esta prestación, de sólo seis meses. Su objetivo: la prestación tiene que llegar a durar un año. Siguen así en su apuesta por el subsidio y las prestaciones que ayudan a compensar a los parados su condición, pero indirectamente les perjudica para encontrar trabajo al volver más cara una futura contratación. El Gobierno tiene claro su objetivo de contentar a los sindicatos, dado su gusto por las medidas populares una huelga general le podría hacer mucho más daño que cualquier choque con los empresarios. En resumen, las únicas noticias a este respecto: la filtración del borrador del Gobierno con su propuesta de las cotizaciones no ha resultado suficiente para nadie y una cena entre Corbacho, Díaz Ferrán, Fernández Toxo, Méndez y Jesús Bárcenas levantó todas las expectativas, pero pasó el tiempo y del acuerdo nada. Se dice desde el entorno del Ministerio de Trabajo que la próxima semana puede ser decisiva. Los críticos a este peculiar diálogo recordarán que eso mismo se dijo de la semana que acaba de finalizar.