ANÁLISIS DE INTERNACIONAL

El mérito de Zelaya

Por Isaac Á. Calvo2 min

Internacional25-07-2009

Son muchos los que critican al presidente depuesto de Honduras, Manuel Zelaya, y le acusan de tener ansias de poder, de querer perpetuarse en el cargo iniciando un proceso de modificación de la Constitución (al estilo de otros líderes latinoamericanos)... Sin embargo, desde que fue obligado por la fuerza a dejar el cargo y a salir del país, Zelaya ha sabido mantenerse en la cúspide de la actualidad informativa. Ese “estar ahí” de Zelaya le ha servido para que se siga hablando del asunto de Honduras y se cuestione permanentemente al nuevo Gobierno de facto encabezado por Roberto Micheletti. Semanas atrás, el derrocado mandatario, con el apoyo de Venezuela, fue capaz de sobrevolar a muy baja altura el aeropuerto de Tegucigalpa ante cientos de sus seguidores. Hace días, Zelaya se atrevió a cruzar unos metros la frontera que separa Honduras y Nicaragua antes de regresar a la parte nicaragüense. Lo hizo rodeado de muchos partidarios y de los medios de comunicación, en lo que constituyó un auténtico show mediático. Todo ello ante la atenta mirada del Ejército hondureño, que tenía órdenes de arrestar a Zelaya si se adentraba mucho más allá. Manuel Zelaya no se da por vencido y sabe que su actitud es imprescindible si quiere regresar al poder, especialmente ahora que los contactos entre las partes en conflicto han fracasado pese a los esfuerzos mediadores del presidente de Costa Rica, Óscar Arias. Zelaya, después de cruzar brevemente la frontera, está acampado en la zona y, según dice, tiene intención de seguir intentándolo. Todo el tiempo que se siga hablando de la crisis hondureña va en favor de Manuel Zelaya. Si éste se hubiera resignado a su expulsión, la cuestión se habría olvidado rápidamente y la Comunidad Internacional, pese a las críticas iniciales a Micheletti, habría asimilado lo sucedido en Honduras.