DEMANDA
Estados Unidos prohíbe la segunda parte de ‘El guardián entre el centeno’
Por LaSemana.es1 min
Cultura02-07-2009
J. D Salinger jamás vio con buenos ojos la secuela de su obra fetiche, El guardián entre el centeno. Hace un mes aproximadamente que el autor presentó una demanda contra el autor sueco que pretendía publicar una segunda parte de la obra, F. Colting. El escritor consideró entonces que la obra infringía sus derechos como autor, además de los de su protagonista.
La orden judicial da la razón, por el momento, a Salinger, y afirma que hay suficientes similitudes entre los personajes principales de ambas obras como para detener la publicación del libro de Colting, quien esgrimía que su secuela era "una parodia crítica que tenía el efecto de transformar la obra original". La juez Deborah Batts impidió así la publicación, distribución y promoción en Estados Unidos de 60 Years Later: Coming Through the Rye (60 años después: Recuperándose del centeno), escrita por el sueco, que usa el pseudónimo de J. D. California, según informaba el periódico estadounidense The New York Times en su edición digital. El autor que supuestamente viola los derechos de Salinger presentaba a un tal Mr. C -que todo el mundo relacionó con Holden Caufield, el protagonista de El guardián entre el centeno- recorriendo las calles de Nueva York tras escaparse de una residencia de ancianos en una trama ambientada unos 60 años después de la época retratada en la obra original. Salinger, que no publica ningún trabajo desde hace cuatro décadas y jamás ha escrito una secuela de la obra en cuestión, situaba a Caufield en su obra como un adolescente rebelde y narraba sus experiencias quijotescas por la Gran Manzana. Sin embargo, la secuela de la famosa obra ya se ha publicado en el Reino Unido por la editorial sueca Nicotext. La de este miércoles es una nueva victoria judicial para el reconocido escritor, que ya recurrió a los tribunales en 1982 para impedir la publicación de una entrevista falsa en una revista y que en 1987 luchó para prohibir la impresión de una biografía que no había autorizado.