SALUD
Obama destinará 63.000 millones para mejorar la salud mundial
Por Luis A. López2 min
Sociedad09-05-2009
El Presidente de EEUU, Barack Obama, pedirá al Congreso 63.000 millones de dólares por un período de seis años para luchar contra las crisis crónicas de la salud mundial, entre las que se encuentran el sida, la malaria y la tuberculosis. Obama dice que "no podemos aislarnos del mundo, ni tampoco hacer caso omiso de los desafíos de salud pública que existen más allá de nuestras fronteras".
La primera partida para este proyecto sanitario global está prevista en su plan de presupuestos para el año fiscal 2010, que comienza el 1 de octubre. La secretaria de Estado Hillary Clinton valoró la inversión en programas mundiales contra estas enfermedades afirmando que "salvará vidas y reducirá la mortalidad". Clinton, a raíz del surgimiento del brote de gripe porcina en México y que está propagándose por todo el mundo, hizo especial hincapié en que la nueva iniciativa de salud global "será un componente fundamental de la política exterior estadounidense que servirá, en definitiva, para "acercar a la gente una mejor salud", algo que considera "un camino a un mundo más seguro, estable y próspero". Clinton añadió que las inversiones en programas de lucha contra enfermedades reflejan el liderazgo de EEUU como una "fuerza positiva para el progreso de todo el mundo". Durante la rueda de prensa celebrada en la Casa Blanca el pasado 5 de mayo, el vicesecretario de Estado Jack Lew aseguró que dicha iniciativa se enfocará en abordar las necesidades de la salud de mujeres, niños y familias en los países en desarrollo, además de frenar el impacto de enfermedades tropicales desatendidas. Lew afirmó, además, que de un lado a esta parte "ha aumentado la cifra en 459 millones de dólares para cuestiones de salud mundial". Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), estas enfermedades "son un síntoma de la pobreza y la desventaja, ya que los principales afectados son las poblaciones más pobres que a menudo viven en localidades remotas, rurales, barriadas o zonas de conflicto". El plan de sanidad de Obama pretende garantizar a todos una buena cobertura médica y económicamente asumible, dado que mejorarán la calidad de los servicios y se rebajarán los costos. Ayudas a quien más lo necesita Durante los dos mandatos de Bush, EEUU ha destinado unos 19.000 millones de dólares en la lucha contra el sida en los países pobres, salvando a muchas personas a las que se les había negado un tratamiento que sólo las economías ricas pueden permitirse. El ex presidente, además, ayudó a lanzar el Fondo Mundial de Lucha contra el sida, la Tuberculosis y la Malaria en 2002, y estableció un año después el Plan de Emergencia del Presidente para el Alivio del sida (PEPFAR), centrándose en 15 países, principalmente del continente africano. Cabe plantearse si estas cifras que se manejan a día de hoy serán suficientes para paliar los enormes problemas en el marco sanitario mundial. Se corre el peligro de creer que estas políticas e iniciativas serán mera ciencia ficción, aunque millones de personas en todo el mundo albergan la esperanza de que estas medidas se apliquen en las regiones más necesitadas, como son los países pobres del tercer mundo, que suelen ser las zonas peor atendidas.