SALUD
La hipertensión y el tabaco, los responsables de una vida más corta
Por Tamara Santos1 min
Sociedad28-04-2009
Tener una vida sana, hacer deporte, alimentarse bien; son consejos que cualquier ciudadano ha podido escuchar en repetidas ocasiones a lo largo de su vida. Por esta razón resulta alarmante que el tabaco y la hipertensión sean la principal causa de muerte prematura como resultado de unos malos hábitos saludables.
Hasta 12 factores de riesgo ha podido contabilizar el grupo de investigadores encargados de analizar los modos de vida de la sociedad estadounidense. El ejercicio publicado en PLoS Medicine ha analizado las principales causas mortales en Estados Unidos durante el año 2005, siendo el tabaco, el alcohol, el sedentarismo, la alta ingesta de sal, el bajo consumo de verduras y frutas, la hipertensión, el exceso de grasas y el deficiente consumo de omega3, los principales causantes de las enfermedades que provocaron la muerte durante ese año. De los 2,5 millones de fallecidos en 2005, medio millón murió por alguna enfermedad relacionada con el consumo de tabaco, 400.000 a causa de la hipertensión; lo que supone entre ambas, una de cada cinco muertes. Seguidamente, el sobrepeso-obesidad y el sedentarismo fueron los responsables de una de cada 10 muertes. Las enfermedades cardiovasculares, el cáncer, los problemas respiratorios y la diabetes son las afecciones que se cobraron la vida de un mayor número de personas. El tabaco fue responsable del 35 por ciento de las víctimas de cáncer, afectando a su vez a otras afecciones respiratorias y agravando la diabetes. Las enfermedades coronarias se llevaron a un 45 por ciento de víctimas a causa del sobrepeso, el sedentarismo o el colesterol. Gran parte del problema se encuentra en el tipo de dieta de la sociedad; las altas cantidades de sal (que supusieron el cuatro por ciento de las muertes) o el excesivo consumo de alcohol (que causó 90.000 víctimas mortales). Este problema que refleja la sociedad estadounidense es sólo una muestra de lo que sucede en gran parte de los países desarrollados como consecuencia de la falta de dedicación para llevar una vida más saludable, por ello, los expertos proponen poner en marcha programas que incentiven mejorar los hábitos de salud.