CIENCIA
Alertan de que la temperatura de la Tierra puede aumentar dos grados
Por Javier M. Fandiño2 min
Sociedad30-04-2009
Cada vez queda menos tiempo para intentar detener el cambio climático. Dos estudios publicados por la revista Nature muestran la necesidad de frenar la masiva emisión de CO2 a la atmósfera y piden un mayor compromiso en la próxima cumbre sobre el cambio climático para evitar que la temperatura global aumente 2ºC.
La revista Nature publicó el pasado 30 de abril dos informes sobre el cambio climático elaborados por un conjunto de científicos europeos y norteamericanos. Según ellos, la situación que vive el planeta Tierra en este momento es "especialmente preocupante". Uno de los estudios, realizado por un equipo británico coordinado por Myles Allen y David Frame, miembros del cuerpo docente de la Universidad de Oxford, ha concluido que la emisión de 3¬67 billones de toneladas de dióxido de carbono supondría un aumento de la temperatura media de la Tierra en dos grados centígrados. Si se llegase a alcanzar esta cifra, el desarrollo de la vida estaría en grave peligro. Lo especialmente preocupante es que los expertos concluyen que ya hemos alcanzado la mitad de esta frontera. Un grupo de científicos alemanes encabezados por Malte Meinshausen, miembro del Instituto de Investigación del Cambio Climático de Postdam, elaboró el segundo informe. Los expertos alemanes han concluido que si se mantiene hasta 2050 el ritmo de emisiones de CO2 que realizamos a la atmósfera cada año, excederemos en un 50 por ciento las posibilidades de aumentar en dos grados centígrados la temperatura global de la Tierra a finales del siglo XXI. Sin embargo, proponen una solución. Afirman que si los 110 países que se han comprometido a reducir sus emisiones de dióxido de carbono redujesen en más de la mitad las emisiones mundiales efectuadas en 1990, únicamente nos excederíamos un 25 por ciento de las posibilidades de aumentar la temperatura de nuestro planeta. Mientras tanto, el calentamiento global sigue avanzando a pasos agigantados. Un día antes de que Nature publicase los resultados de las investigaciones, la Agencia Espacial Europea (ESA) descubrió vía satélite que una masa helada del tamaño de la ciudad estadounidense de Nueva York se separó de la Antártida. El bloque de hielo, de unos 700 kilómetros cuadrados, se desprendió del bloque Wilkins fragmentándose y dando lugar a un gran número de icebergs. No es la primera vez que ocurre esto al bloque Wilkins. Se calcula que ya ha perdido un tercio de su superficie inicial de 16.000 kilómetros cuadrados y se estima que podría perder entre 700 y 3.000 más tras la separación de este último bloque. La consecuencia primera de esta fragmentación es el aumento considerable de temperatura -cercano a los tres grados centígrados- que ha sufrido la Antártida en los últimos cien años.