CONTAMINACIÓN
Medio Ambiente tratará de atajar el efecto invernadero con más árboles
Por Fernando Cancio Martínez1 min
Sociedad23-01-2002
La capacidad de absorción de dióxido de carbono que tienen los bosques es la pregunta que tratan de resolver la mayoría de los países firmantes del Protocolo de Kioto para poner a punto sus inventarios forestales. Si se consigue descontar el carbono de las emisiones de gases de efecto invernadero, todas las medidas para reducir las emisiones serán más baratas.
En 1999, España emitió cerca de 400 millones de toneladas de gases de efecto invernadero, de las cuales el 75 por ciento eran de dióxido de carbono, según confirmaba Medio Ambiente. Con el Plan Forestal del Ministerio se quiere reforestar en los próximos 30 años 3,8 millones de nuevas hectáreas. El número de hectáreas con superficie forestal es de 26 millones, aproximadamente el 51 por ciento del territorio nacional. Entre los 150 puntos que contiene el plan cabe destacar la elaboración de instrucciones básicas de ordenación y aprovechamiento de montes, el fomento de la selvicultura o el apoyo a la vigilancia, prevención y extinción de incendios. Los bosques españoles aportan al año 680 millones de euros (113.000 millones de pesetas) en concepto de producción forestal, pero se deja de lado lo que los expertos forestales denominan internalización, como la fijación de dióxido de carbono que tendrá valor en el futuro mercado de derechos de emisiones o en el mantenimiento de la biodiversidad y paisaje. Otro problema pendiente de solución, sobre todo en países mediterráneos, es la desertificación. Gracias a esos 3,8 millones de nuevas hectáreas que se van a reforestar, cada español dispondrá de 250 árboles, el doble de los 125 que hay. También se espera aumentar el porcentaje de masas forestales mixtas de un 47 a un 65 por ciento y que en el 2032 haya 43.800 nuevos puestos de trabajo rurales. Los 320.000 millones de euros que supone el plan los administrarán las comunidades autónomas con la ayuda de la Unión Europea. Para los ecologistas y socialistas estas propuestas parecen difíciles de cumplir dado que no existe una nueva Ley de Montes que lo respalde.