BOLIVIA

Morales saca adelante la reforma de la Constitución con una amplia mayoría

Por Miguel Martorell2 min

Internacional28-01-2009

“La votación decide qué tipo de país queremos”. Con estas palabras, antes del cierre de los colegios electorales, el presidente de Bolivia, Evo Morales, llamaba a sus conciudadanos a aprobar la reforma de la Constitución nacional en un importante referéndum. Hasta el 60 por ciento de los bolivianos aprobó la reforma, un porcentaje menor del esperado y que no incluye a cuatro departamentos autonomistas.

Cerca de 3,9 millones de bolivianos estaban llamados a las urnas en el primer referéndum constitucional que se celebra en la historia de Bolivia. La jornada de votación se celebró sin incidentes y bajo la supervisión de 350 observadores internacionales de la Organización de Estados Americanos, la Unión Europea y la fundación estadounidense Jimmy Carter. Las declaraciones de Evo Morales antes del cierre de las urnas dan una idea de la importancia que el Gobierno concedía a este referéndum, con el que saldrá adelante el proyecto de Constitución promovido por el presidente. Sin embargo, los resultados no son del todo satisfactorios para el Ejecutivo indigenista. A pesar de contar con un 60 por ciento de los votos a su favor, el Gobierno de Morales había fijado entre el 65 y el 70 por ciento los apoyos para proclamar una victoria. El resultado obtenido en el referéndum viene a confirmar la división del país en dos bloques: los cinco departamentos occidentales y los cuatro orientales. A esta ajustada victoria del “sí” se suman unas declaraciones del vicepresidente del Gobierno, Álvaro García Linera, que afirmó que la Constitución necesitaría ser aprobada “en todos los departamentos” para considerarse “completamente legítima”. En los cuatro departamentos rebeldes, en la llamada media luna, el rechazo a la reforma supera en algunos casos el 60 por ciento de los votos. “Con este resultado, el presidente Morales tiene que comprender que no puede construir el nuevo país que pretende crear”, aseguró Branco Marinkovic, presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, departamento clave en la promoción del “no” y uno de los cuatro que en 2008 aprobaron su propio estatuto autonómico como protesta frente a las políticas del presidente Evo Morales. Sin embargo, y pese a que los opositores trataron de que calara la idea de un “empate técnico”, Morales permanece firme en sus intenciones. “Aquí no hay ningún empate. Aquí no hay ninguna media luna, sino una luna llena, con la unidad del pueblo boliviano”, proclamó tras conocerse los resultados oficiales, en medio de rumores que apuntan a que podría adelantar las elecciones presidenciales para no esperar hasta 2010. Con la reforma de la Constitución aprobada, los grupos opositores tratarán ahora de que, partiendo de ese “empate técnico”, Morales negocie con los cuatro departamentos rebeldes un “gran pacto nacional” para aplicar los estatutos autonómicos y la Constitución. Sin embargo, los primeros suponen invalidar la mitad de la nueva Carta Magna, lo que hace prever que el presidente no aceptará estas reivindicaciones.