TENIS
Una serbia emerge como alternativa a Henin y a las rusas
Por Álvaro Díaz3 min
Deportes09-11-2008
El circuito femenino de la WTA no contó en esta edición con la hasta ahora mejor jugadora del mundo, Justine Henin. Además, tuvo que decir adiós a la participación de Maria Sharapova por lesión. Pese a ello, la temporada no ha perdido ni un ápice de emoción y espectáculo. Jelena Jankovic se ha erigido en la heredera del número uno de la clasificación, al completar una magnífico cúmulo de resultados, que logró tras mantener un alto nivel de juego durante toda la temporada. Destacó también la campaña del tenis ruso, con Dinara Safina y Elena Dementieva a la cabeza.
La presente temporada de la WTA arrancó con la sorprendente retirada de las pistas de la tenista Justine Henin, que decidió colgar la raqueta en enero, pese a lograr el año pasado completar un fantástico circuito que tuvo como broche de oro el torneo de la WTA en Madrid. Pero con lo que nadie contaba era con la decisión de parar que tomó María Sharapova mediada la temporada, con el fin de protegerse de las constantes molestias que sufría en el hombro derecho. La rusa venía de protagonizar un impresionante inicio de temporada, tras llevarse el primer grande, el Abierto de Australia, además del torneo de Doha (Qatar) y el de Amelie Islands (Estados Unidos), que le permitían aspirar a todo. Tomó el relevo la serbia Ana Ivanovic que, tras vencer en Indian Wells, se proclamó en París campeona de Roland Garros, lo que la catapultó directa al número uno. Sin embargo, y pese a su victoria en Linz, su final de temporada ha sido malo, y finalmente ha acabado descendiendo hasta el cuarto puesto de la general. Sería su compatriota, Jelena Jankovic, la que reinaría esta temporada sobre todas las demás jugadoras. La tenista de Belgrado, que comenzará el año que viene como número uno, ha cosechado hasta el momento los títulos de Roma, Pekín, Stuttgart y Moscú, y ha logrado muy buenos puestos en los Grand Slam: finalista en el Abierto de Estados Unidos y semifinalista en Australia y en Roland Garros. Así, no es de extrañar que la jugadora de Belgrado haya recibido esta temporada el premio a la constancia y a la regularidad. Las siempre presentes hermanas Williams, medalla de oro en el dobles de los Juegos Olímpicos de Pekín, han vuelto esta temporada a los puestos de arriba del ranking, si bien con claras diferencias entre ambas. Serena Williams, por un lado, ha ido este año mejorando poco a poco su juego. Los títulos del Abierto de Estados Unidos, Bangalore y Charleston, en individuales, y el dobles en Wimbledon y en lo Juegos le han permitido llegar entre las tres mejores tenistas al final de la temporada. Por otra parte, su hermana mayor, Venus, aunque sigue manteniéndose entre las mejores, está muy lejos de ser la tenista portentosa que lideraba la clasificación en el año 2002. Esta temporada ha conseguido el torneo individual y de dobles en Wimbledon, el torneo de Zürich y el último título del año, el Torneo de Maestras, que la han recompensado con la cuarta posición en la general. Mención aparte merece el tenis ruso, que ha colocado ha cuatro de las suyas, Dinara Safina, Elena Dementieva, Svetlana Kuztznesova y Vera Zvonareva, entre las ocho mejores del circuito femenino, y que suma este año un total de 22 títulos. La líder del grupo es Safina, que vive sus mejores momentos como profesional, y que se ha alzado con los títulos individuales de Berlín, Los Ángeles, Montreal y Tokio, y con el de dobles en el Gold Coast e Indian Wells. Destaca a su lado Dementieva, que ha completado un circuito para enmarcar, proclamándose campeona en Dubai y Luxemburgo, y consiguiendo medalla de oro en los Juegos de Pekín. Al igual que la temporada pasada, este año la mejor española ha vuelto a ser Ana Isabel Medina, que se sitúa en el puesto 22 del mundo.