Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

SANIDAD

La donación de órganos salva miles de vidas humanas

Fotografía
Por Esteban del PozoTiempo de lectura1 min
Sociedad08-10-2008

Mucha gente se pregunta qué puede hacer ante el dolor de los demás o cómo debe actuar ante la enfermedad o el sufrimiento de otras personas. En numerosas ocasiones, una trágica muerte es la mejor ocasión para responder a esas preguntas. La donación de órganos, practicada en España desde hace más de treinta años, es la mejor oportunidad para saciar el apetito de solidaridad de las personas.

Un enfermo puede pedirle a un familiar o un amigo que done un órgano para poder seguir con su vida. Pero también hay personas que deciden, espontáneamente, convertirse en donantes. En cualquier caso, la decisión es personal: nadie puede presionarle a que done un órgano. Sólo en el caso de accidentes de tráfico, los familiares son los que tienen la última palabra. Los principales obstáculos para validar un órgano vital es que el donante sea hipertenso, diabético o padezca otro problema de salud. Tampoco se puede realizar si los tejidos y el tipo de sangre no es compatible. Además, si donar un órgano pusiera en peligro su salud a largo plazo, no podrá realizar la operación. El tiempo total que dura la recuperación después de un transplante depende del tipo de intervención. La mayoría de donantes se siente bien en un plazo de dos meses (60 días). Para dejar claro que alguien está dispuesto a donar sus órganos en caso de fallecer existen dos vías. La primera, y más sencilla, es comunicárselo a su familia. Cuando muera y el médico pregunte a los allegados sobre el tema, estos harán cumplir sus deseo. La segunda es poseer la tarjeta de donante. Ésta no compromete a nada, sólo expresa la opinión de la persona acerca de las donaciones y, si ocurriese algo, nadie se podría interponer en su parecer. El método de conseguirla es muy sencillo. El donante debe enviar un email a la dirección orct@salud.madrid.org indicando el nombre, la dirección y el teléfono. Los que se arrepientan podrán romper la tarjeta ya que los datos no pasan a ningún tipo de registro.