BOLIVIA
Evo Morales se reúne con sus opositores para cerrar la crisis autonomista
Por Miguel Martorell2 min
Internacional21-09-2008
El presidente de Bolivia, Evo Morales, trata de poner fin a la crisis autonomista desatada en el país andino desde hace casi un mes reuniéndose a puerta cerrada con los líderes de las regiones de Santa Cruz, Rubén Costas, y de Tarija, Mario Cossío. Un "avance muy grande" según el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, que tiene lugar en un clima de tensa espera.
Costas y Cossío, que cuentan con el apoyo de otras cuatro regiones bolivianas en su oposición a Morales, presentaron un documento con una serie de bases para alcanzar el acuerdo con el presidente. Entre ellas, que en las reuniones con Evo deben participar varias instituciones: Iglesia, UE, la OEA y la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur). Además, las bases para iniciar el diálogo con el presidente establecen que los temas a tratar serán la autonomía de las regiones, la entrega de las instituciones estatales tomadas por los opositores en algunos lugares del país y, el asunto que desencadenó la crisis en el país, los ingresos procedentes de los impuestos petrolíferos. Aunque, efectivamente, la retirada a las regiones de dicho impuesto para convertirlo en ayudas sociales a los ancianos fue lo que provocó los graves enfrentamientos registrados en Bolivia desde hace un mes, lo cierto es que los opositores a Morales lo son por su proyecto de Constitución y la voluntad de lograr más autonomía para sus respectivas prefecturas respecto al Estado central. Según el diario argentino La Nación, los primeros encuentros entre el presidente boliviano y los opositores a su Gobierno culminaron sin acuerdo, aunque con pasos por parte de Morales. "Propuse un acuerdo para compatibilizar las propuestas autonómicas regionales con la nueva Constitución política. Pero algunos prefectos no quieren firmar", se limitó a señalar el presidente. Fuentes de las negociaciones indicaron que Evo Morales ofreció a las regiones más autonomía política respecto al Gobierno central si éstas acceden a apoyar el referéndum que el Ejecutivo pretende convocar para sacar adelante la nueva Constitución. Dicha propuesta no fue aceptada en un primer momento por parte de los líderes opositores. Además, el viceministro de Descentralización, Fabián Yaksic, portavoz del Gobierno en las reuniones de Cochabamba, informó de que se han creado tres comisiones de trabajo sobre las reformas a la Constitución y las autonomías regionales, sobre el reparto de la renta petrolera y otra para completar el Poder Judicial. El anuncio del principio de diálogo ha llegado poco después de que el Ejército detuviera al prefecto de la región de Pando, Leopoldo Fernández. El Gobierno de Morales acusa a este mandatario de haberse saltado el Estado de excepción en la región y haber provocado los graves enfrentamientos que culminaron en decenas de civiles muertos. La Corte Suprema de Justicia ordenó el traslado de Fernández a Sucre por su condición de aforado, pero el Gobierno de Morales se negó a tomar esa medida. A juicio del Ejecutivo, el gobernador de Pando debe ser juzgado por un delito de genocidio en la capital boliviana, La Paz, y no regresar a su región, donde cree que podría ser liberado.