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BALONCESTO

Los Celtics reviven su época triunfal

Por Alejandro G. NietoTiempo de lectura3 min
Deportes18-06-2008

Los Boston Celtics retomaron el poder en la NBA 22 años después de su último título. El equipo de Doc Rivers refrendó en la final, contra los Lakers, la solidez que le ha convertido en el mejor equipo de la temporada. La franquicia de Los Ángeles se quedó con la miel en los labios, al igual que Pau Gasol. Sin embargo, ambos equipos, con el dominio mostrado a lo largo de la campaña, han inaugurado una nueva era. Los amantes de este deporte auguran próximas repeticiones de esta final entre los dos conjuntos más laureados de la historia.

Tras asaltar el Staples Centre y situarse a una sola victoria del triunfo en el cuarto partido, los Boston Celtics tenían claro que solamente una catástrofe podía apartarles del triunfo. Por ello, el mejor equipo de la temporada regular redujo marchas en el quinto partido, disputado también en Los Ángeles. Pau Gasol y Kobe Bryant -19 y 25 puntos respectivamente- lideraron a un conjunto angelino que quiso abrir distancias desde el comienzo. Paul Pierce, en un gran segundo cuarto, intentó reanimar a los suyos. Pero a los de oro y púrpura les bastó con controlar a Kevin Garnett y atinar desde el perímetro para llevarse la victoria y mantener vivas, con un 3-2 en el global, sus opciones de remontar. Pero el sexto partido estaba marcado con letras mayúsculas en el calendario de los de Boston. Los de verde lucieron todas sus virtudes desde el primer segundo y maniataron a unos Lakers que apenas aguantaron en el primer parcial. Los chicos de Phil Jackson asistieron impotentes a la exhibición de su rival. Ray Allen y Kevin Garnett, con 26 puntos cada uno, martillearon una y otra vez el aro rival. Un inspirado Rajon Rondo colaboró a que la diferencia alcanzase una magnitud vergonzosa para los angelinos (39 puntos de desventaja al final). Gracias a ello, los Celtics se alzaron (por 4-2) con un anillo que llevaban sin lucir más de dos décadas. Paul Pierce, pese a ceder protagonismo a sus compañeros en el último partido, se llevó el trofeo de Jugador Más Valioso de las finales (MVP). El escolta de los Celtics promedió 23 puntos, seis asistencias y cinco rebotes por encuentro. Pero, al margen de números, el 34 se erigió en un líder carismático, capaz de resolver cualquier entuerto cuanto el equipo se hallaba en problemas. Ayudado de un siempre sólido Kevin Garnett, Pierce convirtió a Boston en un equipo intocable, al que ni siquiera los temibles Lakers pudieron doblegar. El triunfo, el décimo séptimo en la historia de la franquicia, supuso la culminación de una temporada en la que el equipo de Doc Rivers ha dominado con mano de hierro la mejor liga del mundo. Pese a los titubeos al comienzo de los playoffs, los Celtics supieron reponerse y lucir todas sus virtudes, entre las que destaca su gran defensa, para dejar en el camino sucesivamente a Atlanta Hawks, Cleveland Cavaliers, Detroit Pistons y Los Ángeles Lakers. El conjunto angelino tendrá que esperar para recuperar un título de campeón que añora desde hace años, en concreto desde 2002, cuando logró el último de sus tres anillos consecutivos. La llegada de Pau Gasol revolucionó a un equipo que volvió a meterse en la gran final tras cuatro años de ausencia. Pero la escasa aportación de los hombres de banquillo fue un lastre excesivo ante unos Celtics en los que cada hombre rindió a su mejor nivel. El de Sant Boi, que ya ha batido múltiples records esta temporada, perdió la oportunidad de convertirse en el primer español campeón de la NBA. No obstante, con su llegada, los Lakers han recordado al equipo invencible que fueron antaño. Este combate se lo han llevado los Celtics, pero en el país de las barras y las estrellas auguran que no será el primero.