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TELEVISIÓN

Varias mujeres han sido asesinadas tras pisar un plató de televisión

Por Silvia Álvarez-Buylla MartínezTiempo de lectura1 min
Comunicación26-11-2007

El caso de Svetlana no es único. El diario de Patricia registra otro episodio similar. Ocurrió en 2004. Una mujer perdonó las infidelidades de su pareja y semanas más tarde su cadáver fue encontrado en el maletero de un coche.

“Todas las personas que hablan en el programa lo hacen porque tienen una historia que contar que nunca deja indiferente: o irrita o hace reír o conmueve. El carácter de los testimonios es: polémico, que sorprendan por lo exagerado y deben conmover. Cada persona que participa en el programa lo hace porque con su testimonio va a provocar una gran polémica”, afirma Mariona Cubells en ¡Mírame tonto!, un libro que muestra cómo se hace la telebasura en España. Este párrafo demuestra que lo importante para estos programas es conseguir audiencia; buscar el espectáculo; la polémica y provocar la conmoción. Las personas que participan en estos espacios reúnen estas características, pero muchas veces el espectáculo llega a unos los límites insospechados. Svetlana no ha sido la única mujer asesinada después de participar en un programa de televisión. En 2004, en el El diario de Patricia una mujer perdonó las infidelidades de su pareja y semanas más tarde su cadáver fue encontrado en el maletero de un coche. Además, el 17 de diciembre de 1997 la granadina Ana Orantes moría tras ser quemada por su ex marido, José Parejo, con el que tuvo ocho hijos, después de que denunciara malos tratos en un programa de Canal Sur, la televisión autonómica andaluza. El año siguiente, Ana Belén Barroso fue acuchillada en Madrid después de hablar en directo con Ana Rosa Quintana. Y, en 1999, Mar Herrero fue asesinada tras contar su caso ante las cámaras.