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FÚTBOL

Schuster llega para ¬revolucionar¬ al Real Madrid

Por Ángel BrizTiempo de lectura3 min
Deportes15-07-2007

Dos centrales, un delantero y un técnico son las caras nuevas de un Real Madrid que quiere seguir rejuveneciendo la plantilla y volver por la senda del buen juego. De la mano del alemán Bernd Schuster y con el defensa Metzelder, el ex azulgrana Saviola y el portugués Kléper Laveran Lima Ferreira, Pepe, los blancos prentenden volver a encandilar a una afición harta del conservadurismo de Fabio Capello.

El Real Madrid se ha puesto las pilas y, en menos de una semana, ha presentado a su nuevo entrenador, dos centrales y un delantero. La suma de estas cuatro contrataciones asciende hasta los treinta millones de euros, cifra que pagó el conjunto blanco por hacerse con los servicios del defensa Pepe. Bernd Schuster, Javier Saviola y Metzelder llegan con la carta de libertad bajo el brazo y no les ha costado ni un solo céntimo a la directiva que preside Ramón Calderón. Sabia nueva, joven, diferente y con muchas ganas de triunfar en un club grande, como ya intentó Saviola en el Barcelona. El modelo que exponía Fabio Capello no gustaba al Santiago Bernabéu, muy exquisito a la hora de valorar los mejores platos de la cocina. El presidente del conjunto madrileño lo sabía, pero apeló a la garra, actitud y eficacia de títulos instantáneos que ofrecía el técnico italiano, como ya había demostrado en su anterior etapa en el club. Con el título de Liga en la mano, la directiva condenó las imperfecciones de Capello a lo largo de la temporada y le sentenció en forma de despido y el consiguiente desembolso: más de cinco millones de euros. Calderón y los suyos decidieron dar un golpe de timón y apostar por un entrenador que conociera bien la entidad, que fuera joven, proporcionara un estilo de juego vistoso, atrevido y alegre y que tuviera experiencia en España. El elegido no fue otro que Schuster, un alemán de 47 años, ex jugador de los tres equipos más grandes históricamente del país: Real Madrid, Barcelona y Atlético de Madrid. El mismo que no cuajó en el Colonia, defraudó en Levante y asombró en el modesto Getafe, al que colocó en la final de la Copa del Rey y clasificó para la UEFA. El entrenador asumió en mitad de temporada que era un serio candidato para sentarse el año siguiente en el banquillo del Santiago Bernabéu. Y, tras unas duras negociaciones con Ángel Torres, presidente del club getafense, pidió abonar al club los 400.000 euros de su cláusula de rescisión para obtener la carta de libertad, cantidad que el mismo Schuster, ansioso por entrenar en el equipo de Concha Espina, depositó. El alemán, aunque sin haber firmado su contrato entonces, ordenó el fichaje de su compatriota Metzelder, un hombre alto, fuerte, duro, joven, con mucha proyección y que, sobre todo, va bien por arriba. Con veintiún años se convirtió en el jugador más joven sobre el césped en la final del mundial de Corea-Japón en 2002 frente a Brasil. El que le acompañará en la zaga, Pepe, alcanza las 24 primaveras, pero no por ello carece de experiencia. Todo lo contrario: es rápido, virtuoso por arriba, ágil de movimientos, seguro en el corte y con una característica fundamental que lleva buscando mucho tiempo el Madrid, corrección en la salida del cuero. Javier Saviola, por el contrario, ha despertado mayor interés que el resto, ya que procede del conjunto culé que no vio en él las cualidades perfectas para suplir a los titulares. El pibito es uno de esos jugadores que no dan una voz más alta que otra pero que, siempre que le dan una oportunidad, cumple y con nota. Quizá las incorporaciones no sean de tanto renombre, pero con el perfil de jugador luchador los técnicos blancos buscan unión, eficiencia y regularidad. Una estrategia cuay eficacia ya quedó demostrada esta temporada con la consecución del título liguero.