ELECCIONES 27-M
Las elecciones evidencian los puntos débiles de socialistas y ‘populares’
Por Angie Rigueiro
3 min
España03-06-2007
Todos los partidos se han esforzado en trasmitir un discurso victorioso tras las pasadas elecciones municipales y autonómicas. Tanto PSOE y PP se consideran ganadores. Sin embargo, pese a cosechar resultados de mérito en ambos bandos, los pasados comicios han servido también para evidenciar las carencias que padecen los dos principales partidos en algunas regiones.
Quizá la más clara y desde luego la más sonada sea la que el PSOE ha demostrado tanto en la Comunidad como en el Ayuntamiento de Madrid, donde se produjo una goleada total por parte de los populares. Esperanza Aguirre en la Comunidad consiguió diez diputados más de los que tenía en 2003. Mientras que tendrá durante estos próximos cuatro años 67 diputados, el candidato socialista Rafael Simancas sólo tendrá 42 y ya ha anunciado que se irá tras las elecciones generales de 2008. Por otra parte, Alberto Ruiz Gallardón renovó mayoría absoluta y arrasó a su principal adversario político, el socialista Miguel Sebastián. Obtuvo el 55,54 por ciento de los votos, lo que le da 34 concejales, cuatro más que en 2003. Sebastián sólo consiguió un 30,88 por ciento y se quedó con 18 concejales. Todo ello demuestra que la apuesta personal de Zapatero ha fallado totalmente. Por ese motivo, el candidato socialista ha decidido renunciar a ser concejal del Ayuntamiento de Madrid. Abandonará completamente la actividad política y se reincorporará el lunes a su puesto en la Universidad Complutense de Madrid. Lo de Madrid fue un gran golpe para los socialistas que llevan sin gobernar en este territorio varias legislaturas. Pero este no es el único agujero negro al que tiene que hacer frente el PSOE. Un análisis de los datos descubre un importante varapalo también en Valencia. El PP mantuvo sin problemas la mayoría absoluta tanto en la Alcaldía como en la Comunidad. Otro ejemplo significativo de la caída de los socialistas se encuentra en Murcia. Los populares continuarán gobernando en la región gracias a los resultados obtenidos por Ramón Luis Valcárcel, que ha logrado un 2 por ciento más de votos que en 2003 y ha incrementado la diferencia respecto al PSOE a 27 puntos. Pedro Saura, candidato del PSOE, no ha logrado ninguno de los objetivos que se marcó al inicio de la campaña. Problemas en Navarra y el País Vasco Pero el PP también tiene razones para hacer examen de conciencia en algunos puntos de España. Los resultados han evidenciado carencias en lo que al poder territorial se refiere. Los populares continúan muy fuertes en las comunidades autónomas que actualmente gobiernan pero no consigue aumentar sus votos en el resto de comunidades. Por otra parte, pese a basar su campaña casi en exclusividad sobre ETA y la territorialidad de Navarra, tanto en el País Vasco como en la comunidad foral el PP ha perdido votos con respecto al 2003. Precisamente la novedad de las elecciones fue protagonizada por el avance de la coalición nacionalista Nafarroa Bai, que pasa de ocho a doce escaños, convirtiéndose en la segunda fuerza más votada (23, por ciento de los sufragios). En Galicia, que solo hubo elecciones municipales, destacó la derrota de los populares que pese a mejorar en número de votos totales se quedó sin ninguno de los siete ayuntamientos de las principales ciudades gallegas. Otro problema grande que tiene el PP es en Extremadura donde ni la marcha del barón socialista Juan Carlos Rodríguez Ibarra ha permitido mejorar resultados en esa comunidad, feudo tradicional del PSOE. Sin embargo, unos y otros están muy satisfechos y parecen haber ganado. Según el presidente del Gobierno, José Luís Rodríguez Zapatero, mejor que todos estén “satisfechos”. El jefe del Ejecutivo ha celebrado que el PP “también” esté contento con los resultados. “Éstas son las son las cosas positivas que tiene la democracia. Es quizás el mejor balance y el mejor resultado de una jornada electoral, que, por otro lado, transcurrió con un alto grado de ejemplaridad”, agregó.