SALUD
Los españoles desaprovechan los beneficios de la fruta
Por Marta G. Bruno2 min
Sociedad25-05-2007
Los expertos en nutrición y salud están hartos de incentivar el consumo de frutas y verduras entre la población. Sin embargo, un estudio elaborado recientemente por la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC) y Hero Nutrición demuestra que los españoles no están aún concienciados de los beneficios de estos alimentos.
La fruta aporta al organismo vitaminas y minerales necesarios para su correcto funcionamiento, además de una importante cantidad de fibra. También contiene un 90 por ciento de agua, por lo que todo son ventajas. No obstante, la población española no sigue correctamente este hábito, puesto que cuatro de cada diez españoles no consumen las dos raciones de fruta diarias aconsejadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Los resultados del estudio Hábitos alimenticios de los españoles 2006 señalan además que las personas entre 55 y 65 años son las que más fruta consumen, pero los niños y jóvenes apenas la prueban. Más de la mitad de ellos no incluye ni siquiera dos piezas de fruta en su dieta. La mayoría de los ciudadanos encuestados no conoce cuál es la ración ideal de fruta al día. Según la OMS, una dieta equilibrada debe estar compuesta por 400 gramos diarios, lo que equivale al consumo aproximado de dos o tres raciones diarias de fruta y tres de verdura. Este alimento debe predominar porque puede incluso ayudar a prevenir muchas enfermedades comunes entre la población. La fruta ayuda a prevenir el cáncer, reduce el colesterol, evita enfermedades coronarias, mejora la tasa de glucosa de los diabéticos y previene la pérdida de visión, entre otros múltiples beneficios. Su poder antioxidante, sobre todo el de la manzana, lo justifica. Además, los pigmentos rojos naturales de la fresa favorecen la absorción de los rayos ultravioleta del sol y el terpeno, un fitonutriente de la naranja y el pomelo, previene las úlceras y la caries. En general, los expertos insisten en el seguimiento de una dieta equilibrada, en la que se potencie el consumo de estos alimentos y se disminuyan las raciones de carnes, grasas e hidratos de carbono. Algo que los españoles reconocen hacer, ya que el cuarenta por ciento afirma leer los ingredientes de los productos que compran para saber si son sanos y alegan llevar una alimentación correcta, en la que el desayuno juega un papel muy importante.