ORIENTE PRÓXIMO
Ariel Sharon se enfrenta a tres querellas en Bélgica
Por Vicente García Gandía1 min
Internacional25-11-2001
El primer ministro israelí, Ariel Sharon, tiene que rendir cuentas ante los tribunales belgas esta semana por su pasado. Además de los crímenes de Sabra y Chatila, en los que murieron entre 700 y 3.000 civiles palestinos en 1982, el mandatario de Israel se enfrenta a una querella por la muerte de seis niños palestinos desde que se inició la última Intifada.
La denuncia, presentada por 23 supervivientes de las matanzas, se extiende además a otros 14 responsables israelíes. La acusación contra Sharon, por genocidio, crímenes contra la Humanidad, de Guerra y violación del Derecho Internacional, defiende además que el Gobierno de Israel contraviene varias resoluciones de la ONU al ocupar territorio palestino. Las pruebas se basan en su mayor parte en informaciones de los medios de comunicación. El primer ministro israelí, responsable de Defensa cuando fueron cometidos los crímenes de Sabra y Chatila, basa su inocencia en la falta de competencias de los tribunales belgas para juzgar delitos internacionales. Sharon ha sido citado a declarar ante los juzgados belgas el 28 de noviembre. En la semana pasada, otros seis niños palestinos fallecieron en diferentes acciones del Ejército israelí. El pasado jueves, cinco escolares murieron tras la explosión de un proyectil enterrado días antes por las tropas con el objeto de matar a activistas palestinos. Al día siguiente, en el entierro de los cinco niños, las protestas de los palestinos se repitieron. Soldados israelíes dispararon contra los más de 10.000 participantes en las exequias y causaron la muerte a otro joven. Ese mismo día, dos miembros de un partido próximo a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) fallecieron en una explosión en Cisjordania, por circunstancias todavía no definidas. El sábado pasado, la muerte de un soldado alcanzado por un mortero lanzado por palestinos provocó un ataque por tierra y aire contra intereses de la ANP en Gaza, que se saldó con al menos tres heridos, uno de ellos, un niño de 11 años.