NAVARRA
El futuro de la comunidad foral, una decisión exclusiva de los navarros
Por Angie Rigueiro2 min
España18-03-2007
Los navarros tienen la sartén por el mango en lo que a su futuro se refiere. Tienen pleno derecho a mantenerse como una Comunidad Autónoma independiente, así como unirse al País Vasco. La decisión depende única y exclusivamente de los propios navarros y de los límites que marca la Constitución.
Los navarros son los únicos que tienen voz y voto en lo que respecta a su organización. La incorporación no la puede obligar ni el Gobierno de España ni el propio País Vasco, ya que sería una violación de la Carta Magna. La cuestión de la integración de Navarra como una provincia más del País Vasco se baraja dentro del terreno político desde la transición democrática española. Después de arduas negociaciones a tres bandas entre el PSOE, el PNV y la UCD, se decidió que la incorporación de Navarra al territorio vasco se dejara en manos del "órgano foral competente", que finalmente rechazó la propuesta. Desde entonces, Navarra se ha convertido, no sólo en un debate político, sino en una de las exigencias centrales tanto de la banda terrorista ETA como del nacionalismo vasco. Las aspiraciones anexionistas con respecto a Navarra han cobrado una especial relevancia en los últimos meses a la sombra del proceso de paz entre ETA y el Ejecutivo. Tanto la banda terrorista como su brazo político, han insistido en que sin Navarra no hay solución. Desde el punto de vista democrático, Navarra es la única que puede decidir, nadie más podría imponer. Todo ello se encuentra reflejado en la disposición Transitoria Cuarta de la Constitución Española de 1978. El que el artículo 143 afirma que la iniciativa de Navarro a efectos de su incorporación en el régimen autonómico vasco corresponde al Órgano Foral competente navarro, el cual adoptaría su decisión por mayoría de los miembros que lo componen. Para la validez de dicha iniciativa sería preciso que la decisión de este Órgano Foral competente fuese ratificada por referéndum y aprobada por mayoría de los votos válidos. Pero no solo la Constitución da luz verde a Navarra en este asunto, sino que según el artículo 2 del Estatuto de Autonomía del País Vasco, “Álava, Guipúzcoa y Vizcaya, así como Navarra, tienen derecho a formar parte de la Comunidad Autónoma del País Vasco”. Se consideran a la región de Navarra, en el supuesto caso de que ésta quiera su incorporación de acuerdo con el procedimiento establecido en la Disposición Transitoria Cuarta de la Constitución, como uno de los Territorios Históricos que componen la Comunidad Autónoma vasca. En definitiva, Navarra tiene toda la libertad de unirse a la comunidad vasca, así como todo su derecho de decidir no hacerlo. Pero no solo eso, en el caso de que Navarra decidiera unirse a ésta y más tarde cambiase de opinión, los navarros tendrían plena libertad a volver a separarse del País Vasco.