TOROS
El curso de Cayetano y Talavante
Por Almudena Hernández1 min
Espectáculos03-09-2006
Ya había avisado en la Feria de San Isidro. Madrid descubrió entonces a un torero con voz de viejo, como se dice en el cante. O lo que es lo mismo, a un diestro con un desparpajo al que no está acostumbrada la afición en los últimos tiempos, con saber hacer y con una importante y esperanzadora proyección de maestría: Alejandro Talavante.
Así fue pasando el verano, aumentando su saber en el arte de Cúchares, probando incluso la amargura de la cornada -como la que sufrió en San Lorenzo de El Escorial- y, sobre todo, encontrando el sitio de un toreo reposado, propio de los viejos. Así lo hizo en una apretada agenda de paseíllos que se han sucedido durante el verano. Verbigracia: la tarde cumbre del 30 de agosto en Linares, donde los aficionados rememoraron el halo torero de Manuel Rodríguez Manolete. También hay quien ve en él a un tal Tomás... Las comparaciones siguen siendo odiosas. Si los toros se lo permiten, este joven torero extremeño terminará la temporada con buena nota, para emprender el 2007 con la aspiración de llegar al número uno del escalafón. Similares pasos parece seguir Cayetano Rivera, de quienes dicen que ha heredado buena parte de las virtudes de sus antepasados. El nieto de Antonio Ordóñez e hijo de Francisco Rivera Paquirri no sólo atrae a la prensa rosa, pues poco a poco está encandilando a los aficionados más serios. Su cita en la tradicional Goyesca de Ronda será uno de los carteles más atractivos de este mes de septiembre. La expectación está servida y la afición, esperanzada ante quienes pueden ser dos de los toreros que manden en la Fiesta en los próximos años. El tiempo dictará sentencia.