EMPRESAS
El Congreso aprueba el real decreto que amplía las competencias de la CNE
Por Paula Escalada Medrano
2 min
Economía26-03-2006
Una OPA extranjera seguida a un real decreto ley español. Un real decreto ley seguido de la exigencia de explicación de Europa a España. Y una explicación precedida de la aprobación del real decreto ley. Parece complicado, pero todo se resume en un objetivo claro: controlar el mercado energético español.
A finales de febrero el Ejecutivo español aprobaba un real decreto ley que ampliaba las competencias de la Comisión Nacional de Energía (CNE). No directa, pero sí indirectamente, apuntaba a que este decreto era la respuesta que el Gobierno daba a la Oferta Pública de Adquisiciones (OPA) que la empresa alemana E.On había lanzado sobre la española Endesa. Ampliaba las funciones de la CNE para que pudiera juzgar y decidir más ampliamente sobre la OPA. Pero a Bruselas no le gustó en absoluto esta reacción de España y pronto le exigió explicaciones y le dio un plazo para darlas. El plazo venció y, una semana después del mismo, las respuestas llegaron a Europa en forma de carta. Pero, antes de que esta carta llegara a su destino, el Gobierno español ya había dado un paso más en su empeño por controlar el mercado energético. Así, el pasado 23 de marzo el Congreso de los Diputados convalidó el antes mencionado real decreto ley, con la única oposición del PP. Con ello, se amplía la función 14 de la CNE y a partir de ahora este órgano tendrá competencias para analizar las operaciones de compra en el sector energético. Y, tan solo un día después, el viernes 24, a Bruselas llegaba la carta explicativa del asunto. 12 folios en los que el Gobierno reclama su derecho a invocar razones de seguridad pública con las siguientes palabras, que sirven de encabezado a la misiva: “Estados como el español, que han cumplido sus obligaciones de liberalización y han privatizado las empresas del sector, se encuentran obligados a establecer medidas que garanticen que la toma de participaciones en las empresas energéticas no pueda suponer un peligro para la propia estabilidad financiera de las empresas”. Para el Ministro de Economía, José Montilla, la ampliación de la función 14 pretende que la CNE, organismo “regulador e independiente”, tenga más facultades para analizar las operaciones de concentración del sector energético, sobre todo “si estas concentraciones afectan a intereses de carácter general y a activos estratégicos”. La ampliación del decreto no se tramitará como proyecto de ley, por lo que no podrá haber modificaciones en el Parlamento.