EMPRESAS
E.ON, el “tercero” en la contienda de las OPAs energéticas
Por Paula Escalada Medrano2 min
Economía26-02-2006
Una unión por la fuerza nunca suele salir bien. En las películas, los matrimonios forzados, sin amor, siempre acaban en fracaso. Y en la economía y el mundo empresarial por supuesto que pasa lo mismo: si los dos miembros de un posible tótem (Endesa y Gas Natural, por ejemplo) no están de acuerdo en fusionarse, una de dos: la empresa fracasará o, antes de la boda, aparecerá un tercero (pongamos que hablamos de E.ON) que cambiará por completo el panorama.
Septiembre de 2005: la empresa española Gas Natural lanza una Oferta Pública de Adquisición (OPA) a la eléctrica Endesa. Comienza entonces una contienda que, tras dramáticos episodios e intervenciones de altos Órganos como el Tribunal de Defensa de la Competencia (TDC) o la Comisión Nacional de Energía (CNE), parecía que ya había concluido con la aprobación de la operación por parte del Gobierno. Pero, hasta el momento, no ha sido así, pues entre medio de Endesa y Gas Natural ha aparecido un nuevo protagonista en la historia: la empresa alemana E.ON. E.ON es el primer grupo de electricidad y gas privado del mundo y el tercer grupo industrial de Alemania. Con la posible incorporación de Endesa a sus filas pretende crear un gigante energético con 50 millones de clientes en más de 20 países y 107.000 empleados. Por ello, para lograr tal hito, ha apostado fuerte y le ha lanzado una oferta suculenta a Endesa. Quiere adquirir el 100 por ciento de la primera eléctrica española y ofrece un total de 27,5 euros por acción, pagaderos en metálico. Así, con esa cifra, Endesa valdría 29.100 millones de euros. Esta es la primera diferencia en comparación con la primera OPA, la de Gas Natural: el precio. La cantidad expuesta anteriormente es un 29,1 por ciento más de lo que ofreció la gasística. Otra de las diferencias que podrían ser un atractivo para Endesa es que E.ON se compromete a mantener la estabilidad del grupo y a "que conservará un elevado grado de independencia operativa" y "seguiría siendo una compañía española". Además, E.ON promete con su oferta que mantendrá el empleo de los trabajadores de Endesa y que creará una nueva unidad de mercado, con sede en Madrid, que se ocupará del negocio del sur de Europa y América Latina. A pesar de todos los buenos propósitos de E.ON y de todas las ofertas y contraofertas que hagan tanto esta empresa como Gas Natural, el presidente de Endesa, Manuel Pizarro, continúa con su postura de rechazo a las dos operaciones. Para Pizarro, Endesa tiene "un proyecto de futuro propio". Por ello, el presidente de la eléctrica ha exigido un entorno jurídico caracterizado por la "seguridad jurídica”, es decir, que se tome la decisión acatando las leyes y no por intereses políticos.