MEDIO AMBIENTE

Este año será el más seco de la historia

Por Elena R. Blázquez2 min

Sociedad02-10-2005

Las previsiones no son optimistas. Medio Ambiente asegura que la sequía que estamos sufriendo es inédita debido a su intensidad y su crudeza. Las lluvias, donde se producen, siguen siendo escasas, y los embalses disminuyen su volumen cada semana. El intercambio de agua es la única solución en zonas como el Segura.

Las últimas precipitaciones, caídas principalmente en la vertiente mediterránea con hasta 62 litros por metro cuadrado, sólo han suavizado la situación de alarmante sequía que vivimos en España. Las variaciones más significativas son las que se han registrado en la Cuenca del Guadalquivir, donde las reservas han aumentado en 85 hectómetros cúbicos. A pesar de ello, la última semana se han perdido 275 hectómetros cúbicos, lo que supone el 0,5 por ciento del total. Así, en los embalses hidroeléctricos la reserva de agua ha descendido en 71 hectómetros cúbicos (el 0,4 por ciento de la capacidad total), mientras que en los destinados al consumo, la disminución ha sido de 204 hectómetros cúbicos (el 0,6 por ciento de su capacidad total). Con estos datos, la energía hidroeléctrica disponible es de 6.357 gigavatios/hora, lo que supone el 28,8 por ciento de la capacidad total. Las zonas más afectadas son las cuencas internas del País Vasco, y el Ebro, cuyo volumen de agua ha descendido en 59 hectómetros cúbicos. El Ministerio de Medio Ambiente asegura que la demanda de agua en suelo urbano está garantizada. Sin embargo, Madrid se encuentra en el nivel 1 de alerta, lo que obliga a suspender el riego de parques y jardines (salvo los históricos, como el Botánico) y el baldeo de calles. Se intenta reducir el consumo en un 9 por ciento, aunque de momento las restricciones no afectarán a los hogares. La situación empeora en las cuencas de los ríos Júcar (en el 18 por ciento de su capacidad) y Segura (al 10 por ciento). El Consejo de Ministros ha autorizado el pasado viernes el trasvase de 39 hectómetros cúbicos del Tajo al Segura, que sólo se destinarán al consumo humano. La huerta murciana deberá esperar todavía un mes hasta que se decida la cantidad que se desviará para regadío.