MEDIO AMBIENTE
Las reservas hidráulicas disminuyen casi un punto en una semana
Por Alfredo L. Zamora2 min
Sociedad08-06-2005
Hace un año los embalses españoles contaban con más del 76 por ciento de su capacidad, pero en la actualidad la cifra ha disminuido hasta un 58,3 por ciento, casi un punto menos que la semana anterior y una disminución total de 468 hm3 de agua. Además, los principales ríos españoles han perdido más del 41 por ciento de su caudal en tal sólo un año.
España se prepara para la mayor sequía de los últimos 60 años, una situación que se está viendo agravada por la constante ausencia de lluvias y las altas temperaturas. A primeros de mayo las reservas de los embalses superaban el 60 por ciento su capacidad total, cifra que en sólo un mes disminuyó hasta el 59 por ciento. Esta caída se ha visto acelerada y las pérdidas de la última semana se han igualado con las acumuladas durante el mes pasado. Según los datos del Ministerio de Medio Ambiente, las lluvias de la última semana han sido escasas en toda la península. La máxima se ha producido en Navacerrada, que debido a las tormentas veraniegas han acumulado 31 litros por metro cuadrado, aunque esto no ha ayudado a mejorar la situación. El pasado año los embalses madrileños contaban con el 92,4 por ciento de su capacidad total, y a día de hoy la cifra se sitúa en el 58 por ciento. Las de la vertiente mediterránea siguen siendo las cuencas más preocupantes. El Segura está al 17 por ciento de su capacidad total y el Júcar en torno al 30 por ciento. El río más caudaloso en la actualidad es el Duero, que en la estación maña de Castro registra un caudal de 165,51 metros cúbicos por segundo, una cantidad que es superior en quince metros cúbicos a la registrada en las mismas fechas del pasado año. Esta crítica situación ha hecho que las pérdidas en el campo español asciendan hasta los 1.625 millones de euros, afectando principalmente al sector agrícola y al ganadero. La sequía también está amenazando constantemente a los campos españoles ante el temor de que se produzcan incendios. Actualmente la humedad del suelo es similar a la que quedó tras el verano pasado, por lo que sus reservas de agua están por debajo del 25 por ciento, y en algunos lugares de la península no supera el 5 por ciento.