FÚTBOL

Osasuna saca de Europa al Atlético

Por Manuel Rosales3 min

Deportes12-05-2005

El Betis jugará la cuarta final de la Copa del Rey en su historia contra un Osasuna que ha hecho historia al clasificarse por primera vez para disputar el título. El escenario del encuentro será el estadio Vicente Calderón, donde los rojillos sentenciaron el pase. Los navarros pueden disputar incluso la Copa de la UEFA, siempre que el conjunto bético –pasara lo que pasara en la final– termine la Liga clasificado entre los cuatro primeros y dispute la previa de la Liga de Campeones.

La última final disputada por los verdiblancos fue en 1997, donde el equipo verdiblanco, también entonces entrenado por Lorenzo Serra Ferrer, cayó contra el Barcelona. El Betis tratará de llevarse su segunda Copa del Rey, después de la que conquistó en 1977, entonces contra el Athletic de Bilbao en una épica tanda de penaltis. El conjunto de Heliópolis ganó en la Catedral por segunda vez en la Copa, aunque en un partido de mucha tensión, al igual que en la ida, tuvo que esperar a la tanda de penaltis. En los lanzamientos desde los once metros el protagonista fue el joven Antonio Doblas –que empezó la temporada como tercer portero, tras Pedro Contreras y Toni Prats–, que detuvo dos lanzamientos al conjunto bilbaíno. El joven cancerbero bético se ha convertido en una de las revelaciones del equipo Serra Ferrer, y muchos comparan ya sus actuaciones a las del mítico José Ramón Esnaola –entrenador de porteros en el Betis–, que salió triunfador en circunstancias idénticas. El pase del conjunto verdiblanco a la final revolucionó la capital hispalense, donde los seguidores béticos –con mucha sorna: dedicando la final y un posible título al centenario del Sevilla– celebraron el pase a la final como si ya hubieran ganado el trofeo. No en vano, recibieron a la expedición bética en el aeropuerto sevillano de San Pablo a altas horas de la madrugada. Tras las suspicacias por el deseo –hecho público– del presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Ángel María Villar, de que su equipo, el Athletic, pasase a la final y ganara el título, no hubo ningún incidente. Incluso el Comité de Competición de la RFEF acordó dejar sin efecto la roja mostrada al central Juanito, que por tanto, podrá jugar la final. Crisis en el Atlético de Madrid El Osasuna dio la sorpresa –relativa– al apear a un Atlético paupérrimo, sin juego ni referentes, y hacer bueno el gol de Valmiro López, Valdo, en el partido de ida, el único que se ha marcado en los cuatro partidos de semifinales. El partido de vuelta se presentó caliente por las declaraciones del uruguayo Pablo García, que dijo que se iba “a la guerra” y encrespó a los jugadores atléticos. Algunos aficionados rojiblancos apedrearon y rompieron, a su llegada a Madrid, un cristal del autobús del conjunto navarro. El conjunto rojillo, una vez superada su crisis de resultados en la Liga, no sólo tuvo máxima concentración para defender con solvencia su ventaja, sino que sacó a relucir las carencias del Atlético y apenas pasó grandes apuros. Para el mexicano Javier Aguirre, Osasuna mereció pasar la eliminatoria. La afición navarra también festejó el triunfo por todo lo alto. La afición colchonera estalló en contra del equipo y del presidente, Enrique Cerezo, por una temporada que en las últimas jornadas se ha convertido en desastrosa. El único jugador del Atléti que habló fue el capitán, Fernando Torres, quien pidió perdón. Aun así, Ferrando –pese a que tiene un año más de contrato– puede tener los días contados.